Tapachula (México), 7 nov (EFE).- Organizaciones civiles y empresariales estimaron este lunes que hay más de 125.000 migrantes que están diseminados en Chiapas, estado mexicano fronterizo con Guatemala, y en la ruta al vecino estado de Oaxaca.
Entre los migrantes hay venezolanos, cubanos, nicaragüenses, hondureños, guatemaltecos y salvadoreños, pero también hay provenientes de India, Bangladés, Arabia Saudí, China y naciones de África.
El presidente del Centro de Dignificación Humana (CDH), Luis Rey García Villagrán, consideró que tan solo en Tapachula, municipio en la frontera con Guatemala, hay unas 50.000 personas, de las que 25.000 realizan trámites migratorios, mientras que el resto caminan a Estados Unidos sin documentación.
“Es mucha la afluencia de personas que están ingresando todos los días, estuve en el ‘paso del coyote’ (ruta de los traficantes) en los límites fronterizos de México y Guatemala y están ingresando unos 500 diarios”, contó a EFE.
El presidente de la organización de comerciantes Pro-centro en Tapachula, César García Jiménez, declaró a medios que han pasado más de 172.000 migrantes por la ciudad en los últimos meses ante la frecuencia de las caravanas.
Mientras que José Antonio Chol, del consejo de organizaciones de Izquierda Siempre, mencionó que hay “una gran cantidad de extranjeros desesperados” que buscan salir de Tapachula, por lo que exigió a las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) que los atiendan.
“Hay muchos migrantes que caminan por la carretera costera, las veredas y caminos de extravío, donde son asaltados y extorsionados”, denunció.
Estos migrantes están disgregados en los municipios desde la frontera de Guatemala con México en Ciudad Hidalgo, hasta Oaxaca, ya que avanzan en pequeños grupos o en caravanas de unos 1.000 migrantes.
Este lunes, salió un nuevo grupo venezolanos desde Tapachula en caravana, con destino a San Pedro Tapanatepec, Oaxaca, para buscar documentos temporales que les permitan continuar su camino.
El venezolano Elvis Bosa, quien llegó apenas hace una semana a Tapachula, contó que la migración de Venezuela no se ha detenido y sigue firme con su tránsito a los Estados Unidos pese a las restricciones que anunció hace un mes Washington que contemplan la deportación inmediata de quienes lleguen por tierra.
“Nosotros estamos en Tapachula, esperando que (el presidente de EE.UU.,) Joe Biden, derogue su Título 42 que expulsa a los venezolanos de Estados Unidos, para ver si logramos subir para poder cumplir la meta que siempre hemos tenido es llegar a los Estados Unidos”, expuso.
La región vive un flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) detuvo en el año fiscal de 2022 un número inédito de más de 2,76 millones de indocumentados.