Concord (EE.UU.), 22 ene (EFE).- Decepcionados por el apoyo del gobierno de Joe Biden a los bombardeos de Israel en la Franja de Gaza, varios activistas de Nuevo Hampshire han lanzado una campaña para pedir a los votantes que escriban las palabras “alto al fuego” en la papeleta electoral de las primarias demócratas de este martes.
Aprovechando que Biden no participará en los comicios, debido a una lucha interna del partido, el grupo decidió utilizar la votación para llamar la atención de la Administración y de la campaña política del mandatario, explicaron a EFE dos de los impulsores de la iniciativa.
“Estamos indignados por lo que está pasando en Gaza y es necesario que se detenga la masacre”, subrayó Bill Maddocks, un profesor de la Universidad de Nuevo Hampshire que ha estado involucrado en el activismo pacifista desde hace más de 30 años.
Desde que inició la ofensiva contra el territorio palestino, que ya ha dejado más de 24.000 muertos y casi dos millones de desplazados, Maddocks ha estando organizando vigilas semanales para lamentar las vidas perdidas en el enclave.
El coste humano de esta guerra, agregó, “es algo sin precedentes y es descomunal” y es por ello que quisieron usar la voz “de manera directa” entrando en los comicios.
La papeleta de las primarias demócratas en Nuevo Hampshire este martes tendrá una lista de 21 aspirantes a la candidatura demócrata y una última casilla donde los votantes pueden escribir el nombre de un candidato que no esté en la lista.
La campaña pide a los ciudadanos que usen ese espacio en blanco para escribir “alto al fuego”.
Esta iniciativa choca de manera directa con otra campaña, impulsada legisladores y representantes del propio Partido Demócrata en Nuevo Hampshire, que pide a los votantes aprovechar el espacio en blanco para proponer el nombre de Biden y mostrarle apoyo en unos comicios que él mismo decidió ignorar.
Andreu Volinsky, un político y también profesor junto a Maddocks ayudó a crear la campaña del alto al fuego, contó a EFE que varias personas involucradas en este esfuerzo a favor de Biden le han pedido que desista.
“Me han pedido ya que dé un paso atrás y me quede callado”, denunció.
El activista, que aspiró en 2020 a la gobernación de Nuevo Hampshire, no ve su iniciativa como una oposición directa a Biden sino como una manera de sacudirle la conciencia y hacer que cambie su política.
“Estoy intentando ayudarlo a ganar la reelección”, argumentó Volinsky, pues “si le pone la atención a este asunto, podrá atraer a las personas que están preocupadas porque no está plantándole cara a las atrocidades cometidas por Israel”.
Tanto él como Maddocks consideran que, como el mandatario no está participando en las primarias y tiene ya prácticamente asegurada la candidatura, su campaña no afectará los planes electorales de Biden.
“Yo tengo claro que voy a votar por él en noviembre”, aclaró Volinsky, “no existe una alternativa mejor en el horizonte”.
Desde el ataque por parte del grupo islamista Hamás el pasado 7 de octubre, el gobierno de EE.UU. ha mantenido su apoyo a Israel, aún cuando la fuerte retaliación hacia la Franja de Gaza ha sido calificada de un “genocidio” por parte de organizaciones de derechos humanos.
Miles de personas han salido a protestar en varias ciudades del país, incluyendo la capital, exigiendo a la Administración demócrata que cambie su postura y apoye un cese a las hostilidades.
La postura de Biden ha generado un rechazo especialmente entre los jóvenes: más de un 60 % de los votantes entre 18 y 29 años rechazan la manera en la que está manejado el conflicto, según una encuesta publicada por Siena College y el diario The New York Times a finales de diciembre.
Las primarias demócratas están envueltas en una controversia técnica, debido a la decisión del partido de romper con una tradición centenaria y dar inicio a su temporada electoral en Carolina del Sur.
La ley de Nuevo Hampshire obliga a los partidos a celebrar las “primeras” primarias en el país y como resultado, se llevará a cabo una votación que no será reconocida por el Comité Nacional Demócrata y con el principal candidato ausente de las papeletas.
Incluso bajo esta inusual situación, Biden ya amasa un 69 % de apoyo de cara al martes, según una encuesta de la Universidad de Nuevo Hampshire y la cadena CNN.