San Diego, 24 ene (EFE).- Docenas de trabajadores, todos latinos y en su mayoría inmigrantes, iniciaron este martes una huelga indefinida en demanda de un contrato colectivo y en protesta por abusos que aseguran ha cometido la empresa que los subcontrata para limpiar el edificio que alberga al Gobierno del condado de San Diego.
Una trabajadora, Sofía Martínez, dijo a EFE que en noviembre pasado representantes de la empresa subcontratista la o bligaron “a trabajar ocho horas de rodillas con químicos peligrosos sin diluir y sin ninguna protección como mascarilla, rodilleras o guantes, y al día siguiente querían que volviera a trabajar igual”.
Martínez dijo que aceptó continuar pero pidió equipo, pues sentía continuamente náuseas. Sin embargo, los subcontratistas la reportaron por incumplimiento y la despidieron.
El director político del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU) en el oeste de Estados Unidos, Christian Ramírez, dijo a EFE que ese maltrato fue represalia porque la empresa Nova Management se enteró de que Martínez fue una de las trabajadoras que impulsó que la Junta de Supervisores del condado aprobara hace semanas un nuevo reglamento.
La Junta aprobó por unanimidad que las compañías que presten servicios al condado deben otorgar contratos colectivos a sus trabajadores.
Martínez denunció que, en vez de cumplir con lo que los supervisores decidieron, la empresa obligó a renunciar a tres empleadas y despidió a dos más.
La empresa no respondió a lo inmediato a solicitudes de la prensa.
“Mientras exista una huelga, no cruzaré la línea del piquete (barricada o bloqueo por parte de trabajadores). Me uno a nuestros trabajadores”, dijo la presidenta de la Junta de Supervisores, Nora Vargas,quien confeó sentirse “decepcionada de que hayamos llegado tan lejos”.
Vargas lamentó que “mientras el condado aceleró el proceso e hizo todo lo posible para garantizar que se cumplieran las demandas de nuestros conserjes, Nova Management no pudo llegar a una resolución justa, lo que obligó una huelga”.