Ciudad de México, 1 feb (EFE).- La calificadora de riesgo Standard & Poor’s (S&P) Global Ratings ratificó este jueves la calificación soberana de México en ‘BBB’, con perspectiva estable, sin considerar afectaciones por los comicios del 2 de junio próximo en el país, en un entorno de tendencias adversas a nivel global.
“Este horizonte incluye el período previo a las elecciones nacionales de junio, el período de transición presidencial y el inicio de la próxima administración”, destacó la agencia en su más reciente reporte.
La entidad esperó que se mantenga “un manejo macroeconómico cauteloso, incluida una política monetaria prudente y un retorno a déficits fiscales bajos” en los dos próximos años, cuando ocurrirán las elecciones más grandes para México, el periodo de transición presidencial y el inicio de la próxima Administración pública.
Descartó posibles iniciativas políticas que puedan afectar el ambiente de negocios o la tendencia de crecimiento económico de largo plazo para el país.
Conjunto de elementos que S&P estimó como clave para incentivar “la confianza de los inversionistas y el acceso a los mercados internacionales de capitales, incluso en periodos de tendencias adversas a nivel mundial”.
Esto, en la antesala de la presentación del último paquete de reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador, donde ha delineado cambios en materia de pensiones, salarios mínimos, energía, seguridad, el poder judicial y órganos autónomos, entre otras.
En contraste, previó que la próxima administración del Gobierno mexicano deberá aprovechar las oportunidades de inversión desatadas por la relocalización de empresas extranjeras, fenómeno conocido como ‘nearshoring’.
Por su parte, anticipó como un riesgo a la baja el alto nivel de déficit que sostiene el Gobierno mexicano, lo que podría conducir a un margen de endeudamiento más pronunciado, a pesar de tres años consecutivos reduciendo su nivel de deuda con respecto a su producto interno bruto (PIB).
Hasta ahora, agencias como Moody’s y Fitch Ratings también han mantenido la perspectiva estable para la calificación soberana de México, con niveles de ‘Baa2’ y ‘BBB-0’, respectivamente.