Redacción Deportes, 4 feb (EFE).- La australiana Skye Nicolson venció este sábado por decisión unánime a la española Tania Álvarez y obtuvo el cinturón de plata de peso pluma del consejo Mundial de Boxeo.
Las calificaciones en las tarjetas que dieron el triunfo a Nicolson fueron 98-92, 97-93 y 100-90. Skye ahora tiene récord invicto de seis triunfos y Tania quedó con siete triunfos, uno por la vía rápida, y una batalla perdida.
Álvarez fue la primera española en actuar en el Teatro Hulu del Madison Square Garden, de Nueva York, lugar donde se realizó el combate.
La europea arrancó agresiva. Con el volado de izquierda como su principal arma, la australiana un tanto desconcertada recurrió al amarre para controlar cada embestida.
A partir del segundo episodio Nicolson conectó poderosos derechazos, a pesar de eso su rival no retrocedió, intentó el intercambio de golpes, pero la fuerza y puntería de la nacida en Meadowbrook, Australia terminaron por lastimar el ojo derecho de su rival en el cuarto round.
En el quinto episodio Tania volvió a intentar el intercambio de golpes, pero Nicolson la recibió con combinaciones que maltrataron aún más el rostro de la catalana.
La australiana reiteró con volados de derecha que penetraron ante la deficiente defensa de su oponente; completó su ataque con ganchos que entraron a placer en las zonas blandas de Álvarez, que valiente, no retrocedió.
Dueña de la situación Nicolson mantuvo se mantuvo a distancia segura de la española en el séptimo. Marcó una y otra vez con el jab al rostro y esquivó los embates con buen juego de cintura.
A pesar de la superioridad de Skye, la pugilista española no dejó de ir al frente. Con la guardia descompuesta atacó con golpes de derecha el cuerpo de su rival, aunque con poca puntería, aunque logró que Nicolson exhibiera cierto cansancio por el esfuerzo en el octavo y noveno round.
Sabedora de que las tarjetas estaban a su favor la australiana controló la agresividad de su oponente con continuos amarres contra las cuerdas. Tania intentó con volados de derecha encontrar el golpe que le diera la victoria, pero como sucedió a lo largo del combate, su falta de puntería le pasó factura y cargó con la derrota.