París/Washington, 28 jul (EFE).- La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) recordó las sospechas sobre la implicación del príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed Bin Salman, en la muerte del periodista Jamal Khashoggi en 2018, en vísperas de su visita a París para reunirse con el presidente francés, Emmanuel Macron.
“Casi cuatro años después del asesinato del periodista Jamal Khashoggi, la reintegración de Mohamed Bin Salman en las relaciones internacionales solo supone desprecio a la verdad y a la justicia”, indicó el secretario general de RSF, Christophe Deloire.
El príncipe saudí prevé mantener este jueves por la noche una cena de trabajo con el presidente francés en el Elíseo, pocos días después de haber recibido en Riad al presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Deloire pidió a Macron que solicite a Bin Salman la liberación de los 27 periodistas que están actualmente detenidos en ese país, además de que permita la salida de Raif Badawi, retenido tras haber purgado 10 años de cárcel y cuya familia le espera en Canadá.
RSF había presentado una demanda en Alemania contra el príncipe heredero por el asesinato de Khashoggi, al considerar el sistema judicial de ese país más apropiado para este tipo de denuncias.
Dos ONG extranjeras, Democracy for the Arab World Now (DAWN) y Trial International, anunciaron este jueves haber presentado a su vez una demanda ante el Tribunal de París por complicidad en tortura y desaparición forzosa.
Esas organizaciones lamentaron estar haciendo el trabajo que a su juicio deberían ejercer los gobiernos. La única respuesta adecuada al asesinato del reportero “no es una invitación a cenar, sino una investigación penal”, dijeron en conferencia de prensa telemática.
“También queremos la verdad. Todavía no sabemos qué hicieron con su cuerpo y no se le ha podido dar la sepultura que merece”, sostuvo la directora ejecutiva de DAWN, Sarah Leah Whitson, criticando que dejar impune a Bin Salman envía la señal de que mientras haya intereses económicos de por medio es posible escapar de cualquier responsabilidad.
Esos grupos, que aprovecharon la presencia del príncipe heredero en suelo francés para interponer su denuncia, avanzaron que la designación de un juez que siga el caso podría demorarse meses e incluyo un año.
La presidenta del grupo parlamentario “macronista” en la Asamblea Nacional, Aurore Bergé, había justificado la visita con el argumento de que “dialogar con el conjunto de los países del Golfo es una necesidad absoluta”, al tiempo que “eso no significa olvidar los asuntos esenciales en términos de valores y de derechos humanos”.
En declaraciones a la radio France Info, Bergé indicó que Macron “tiene que recibir a ciertos interlocutores” y recordó que el propio Biden viajó recientemente a Riad, lo que demuestra “la necesidad de mantener un diálogo profundo con los países del Golfo” Pérsico.