Miami, 7 feb (EFE).- La coalición defensora de los inmigrantes ABIC Action rechazó este martes el “desvío de dinero” del gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, para financiar un “plan cruel” de reubicación de inmigrantes irregulares fuera del estado.
En una conferencia de prensa en Apopka, en el centro de Florida, el director de ABIC Action para Florida, Samuel Vilchez Santiago, cargó contra DeSantis por “seguir desviando fondos de los contribuyentes” para financiar un “draconiano” programa de reubicación de inmigrantes, mientras los floridanos “luchan para pagar alimentos, vivienda y servicios públicos”.
En ese contexto, la coalición pro inmigrantes destacó que estos cubren la escasez crítica de mano de obra en industrias clave como construcción, agricultura, hostelería o atención médica.
Así, en el sector de hostelería, por ejemplo, desde el otoño pasado se contabilizan 1,6 millones de puestos de trabajo vacantes, una fuerza laboral que, antes de la pandemia, comprendía entre el 30 y 40 % de los trabajadores nacidos en el extranjero, explicó Vilchez.
“Hablando claramente, el gobernador está poniendo sus ambiciones políticas primero y nuestra economía en último lugar”, añadió el activista.
En su opinión, DeSantis debería poner freno a “continuar traumatizando a estas familias inmigrantes, a pesar de que fortalecen nuestra economía, empresas y comunidades. ¡Ya Basta!”, exclamó.
ABIC Action, junto con líderes religiosos e importantes organizaciones en favor de inmigrantes de Florida criticaron duramente en septiembre pasado a DeSantis por ordenar el traslado a la isla Martha’s Vineyard, en Massachusetts, de medio centenar de inmigrantes indocumentados.
Según el texto de un plan de presupuesto estatal de 114.800 millones de dólares para año fiscal 2023-24, se incluirían 12 millones “para continuar con la implementación de la iniciativa del gobernador para proteger a los floridanos contra los daños resultantes de la inmigración ilegal al facilitar el transporte de extranjeros no autorizados”.
El traslado de inmigrantes irregulares ha motivado demandas judiciales contra DeSantis en Massachusetts y también en Florida, además de una investigación por parte de autoridades federales.