Miami, 2 dic (EFE).- El estado de Florida (EEUU) anunció que retirará 2.000 millones de dólares que tiene con la poderosa firma de gestión de activos BlackRock debido a discrepancias con sus políticas ambientales, sociales, una decisión a la que la compañía respondió diciendo que los floridanos serán los perjudicados.
Florida, cuyo gobernador, Ron DeSantis, se ha transformado en una figura relevante dentro del Partido Republicano, sigue con esta medida contra BlackRock los pasos de Luisiana y Misuri, cuyos gobiernos, también conservadores, anunciaron en octubre que retiraban millones de dólares de BlackRock en rechazo a sus políticas ambientales, sociales y corporativas (ESG, por sus siglas en inglés).
El jefe financiero de Florida, Jimmy Patronis, al anunciar la que es señalada como la mayor desinversión de este tipo por parte de un estado, criticó al director ejecutivo de BlackRock, Larry Fink.
“Si Larry, o sus amigos de Wall Street, quieren cambiar el mundo, preséntense como candidatos. Inicien una organización sin fines de lucro. Donen a las causas que les importan”, señaló en un comunicado emitido este jueves.
De acuerdo al anuncio de Patronis, el Tesoro estatal, bajo su supervisión, pedirá que se congelen de forma inmediata 1.430 millones de dólares en valores a largo plazo bajo gestión de BlackRock, con miras a reasignar el dinero a otros administradores hacia principios de 2023.
De igual modo, le quita a la firma, la mas grande de su tipo en EEUU, como administrador de aproximadamente 600 millones de dólares de inversiones a corto plazo.
“La División del Tesoro de Florida se está deshaciendo de BlackRock porque han declarado abiertamente que tienen otros objetivos que generar rendimientos”, dijo Patronis en su comunicado.
Aludió a una carta a directores ejecutivos escrita por Fink a comienzo de año, en la que, según dijo, el directivo de la firma de gestión de riesgo defiende que “el capitalismo tiene el poder de dar forma a la sociedad”.
“Creo que es antidemocrático que los principales administradores de activos usen su poder para influir en los resultados sociales”, expresó Patronis.
“Usar nuestro efectivo para financiar el proyecto de ingeniería social de BlackRock no es algo en lo que Florida se haya inscrito. No tiene nada que ver con maximizar los rendimientos y es lo contrario por lo que se le paga a un administrador de activos”, agregó.
BlackRock, que maneja un fondo de 8 billones (millones de millones) de dólares, emitió una declaración en la que lamentó la decisión, la cual antepone la política sobre los intereses de los inversores, en especial “dados los sólidos rendimientos que BlackRock ha brindado a los contribuyentes de Florida durante los últimos cinco años”, como recoge este viernes el medio USA Today.
“Nos preocupa la tendencia emergente de iniciativas políticas como esta que sacrifican el acceso a inversiones de alta calidad y, por lo tanto, ponen en peligro los rendimientos, lo que en última instancia perjudicará a los ciudadanos de Florida”, añadió.