Nueva York, 4 ago (EFE).- La organización Legal Aid acudió este viernes a los tribunales para reclamar que la ciudad de Nueva York cumpla con la ley que le obliga a dar albergue a quien lo solicite, después de que cientos de inmigrantes durmieran a la intemperie estos días en espera de ser enviados a un refugio.
Legal Aid, que brinda servicios a personas de bajos recursos y que representa a los inmigrantes que buscan alojamiento en Nueva York, había advertido de que tomaría medidas en vista de los cientos de recién llegados que hicieron cola por días fuera de un hotel donde la ciudad estableció un centro de procesamiento.
En una audiencia de emergencia, un juez ordenó a la ciudad que presente al Gobierno del estado una lista de sus necesidades, incluidos los recursos e instalaciones de propiedad u operados por el Gobierno federal, para cumplir con la ley de derecho a vivienda, que existe desde hace cuatro décadas.
La ciudad debe entregar la lista al estado antes del 9 de agosto, y por su parte el estado debe responder a la propuesta antes del 15 de agosto, señaló Legal Aid en un comunicado.
El tribunal citó la próxima audiencia de este caso para el 16 de agosto.
“Desde el primer día, hemos pedido una respuesta de todo el gobierno para hacer frente a este momento. Esto no solo incluye al gobierno federal, sino también al estado” de Nueva York, señalaron en el comunicado conjunto Legal Aid y la Coalición para Personas sin Hogar.
Afirmaron que el estado “debe utilizar su autoridad y jurisdicción” para proporcionar “de inmediato” los recursos y la coordinación necesarios para que la ciudad acomode a todos los que necesitan refugio, según estipula un caso histórico llamado “Callahan vs Carey”.
“Ningún neoyorquino quiere ver a más personas o familias relegadas a las calles”, indicaron.
De acuerdo con los datos más recientes de la Alcaldía, a la ciudad han llegado en un año más de 95.600 personas, incluyendo niños, y 56.600 están bajo su cuidado, lo que implica suministrarles albergue, comidas y otra ayuda y que ha creado una crisis humanitaria y fiscal.
La cifra se eleva a 107.900 al incluir a los neoyorquinos sin techo, y según la Administración de alcalde Eric Adams, no se descarta ninguna opción para alojarles.
El alcalde ha reiterado que no hay espacio en Nueva York y lanzó una campaña en la frontera para disuadir a los migrantes tras pedir el pasado mayo a un tribunal dejar sin efecto temporalmente la ley que le obliga a facilitar albergue, pero aún no hay decisión.
La ciudad ha tenido que abrir 194 lugares para los recién llegados, incluyendo el alquiler de hoteles en la zona metropolitana y al norte del estado.