Budapest, 11 mar (EFE).- Washington dejará de ayudar financieramente a Ucrania para que se defienda del ataque ruso en el caso de que el republicano Donald Trump vuelva a ser elegido presidente de Estados Unidos en las elecciones de este año, ha afirmado el primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, dos días después de su encuentro con el exmandatario estadounidense.
“(Trump) no dará ni un céntimo para la guerra (entre Ucrania y Rusia), por lo que la guerra terminará, ya que está claro que Ucrania no es capaz de mantenerse a sí misma”, afirmó Orbán en declaraciones a la televisión pública M1 el domingo por la noche.
Orbán, considerado un aliado político del Kremlin, hizo estas declaraciones tras entrevistarse con Trump el viernes en Florida (EEUU), insistiendo en que si Estados Unidos y los países de la Unión Europea (UE) no les dan más dinero y armas a Ucrania “la guerra termina”.
Por instrucciones de Trump, la cúpula del partido republicano en el Congreso lleva semanas bloqueando la luz verde a un nuevo paquete de ayuda financiera para Kiev.
“Trump dice que si vuelve (al poder) no propondrá iniciativas como éstas”, afirmó el mandatario húngaro, un admirador declarado del exjefe de la Casa Blanca.
En los últimos meses, Orbán ha alabado al candidato republicano y reiterado su convicción de que ni la invasión rusa de Ucrania ni la guerra de Israel contra el grupo terrorista Hamás hubiesen estallado si Trump hubiese ocupado la presidencia de su país.
Por otra parte el primer ministro húngaro subrayó que “Trump no quiere financiar la seguridad de Europa en vez de los europeos”, aludiendo a las polémicas declaraciones que el candidato republicano hizo sobre que no está dispuesto a defender a los países miembros de la OTAN que incumplan los objetivos de gastos en defensa del 2% de sus respectivos PIB.
Orbán fue el único jefe de Gobierno de la UE que expresó públicamente su apoyo a Trump en las elecciones de 2016 y 2020, así como durante los juicios iniciados contra el candidato presidencial el año pasado, que considera “prácticas comunistas”.
Por su parte, Trump ha valorado al jefe del Gobierno húngaro, que suele estar enfrentado a la instituciones de la UE, como “el político más duro de Europa”.