Nueva York, 5 may (EFE).- La ciudad de Nueva York ha habilitado varios gimnasios para alojar de forma provisional a los emigrantes que siguen llegando desde la frontera con México, una vez saturada la capacidad de los hoteles requisados para este fin.
“Solo en el día de ayer hemos recibido a cientos de solicitantes de asilo y hemos alcanzado el límite de refugios que podemos abrir. No nos queda más opción que alojar a los recién llegados temporalmente en gimnasios”, dijo hoy el portavoz municipal Fabian Levy.
Levy dijo que la ciudad abrió en los últimos meses 122 refugios de emergencia (incluidos hoteles) y ocho grandes centros, pero “ahora nos llegan informaciones de que una red de activistas están organizando llegadas a gran escala a Nueva York por avión, autobús y otros medios de transporte, aprovechándose de las leyes de la ciudad y el estado y engañándolos con falsas promesas”.
La cadena ABC señaló que entre las instalaciones habilitadas de urgencia se encuentra una antigua academia de policía, que lleva sirviendo de centro de acogida al menos una semana.
La ciudad de Nueva York provee alojamiento a los más de 50.000 emigrantes que han llegado desde el pasado agosto -una ley le obliga a no dejar a nadie en la calle-, y les está proveyendo además de alimentación y escuela para los niños, pero el alcalde Eric Adams ya ha declarado en numerosas ocasiones que la capacidad de la ciudad ha llegado al límite.
“Llevamos un año pidiendo ayuda y ahora con el levantamiento del Título 42 la semana próxima y los cientos de solicitantes que llegan a Nueva York a diario, necesitamos de forma desesperada ayuda federal y estatal para gestionar esta crisis”, insistió el portavoz municipal.
Estados Unidos pondrá fin el próximo 11 de mayo a la emergencia sanitaria por la covid-19, lo que implicará el levantamiento del Título 42, utilizado desde el mandato de Donald Trump (2017-2021) para las devoluciones en caliente de migrantes en la frontera con la excusa de la pandemia.
El Gobierno de Joe Biden ha pronosticado un aumento de las llegadas de migrantes de distintos países de la región a la frontera con México y ha desplegado a 1.500 militares en la zona para apoyar en tareas migratorias.