Durante los últimos años, diversos intérpretes de música regional mexicana se han visto envueltos en escándalos relacionados al narcotráfico, ya sea por amenazas por parte de algún cártel de las drogas, o bien por realizar presentaciones en fiestas de líderes criminales. Sin embargo, pocos han tenido la mala fortuna de tener diversas experiencias de este tipo, y uno de ellos es el cantante Marco Flores, vocalista y líder de la Banda Jerez, quien hoy en día representa un cargo público como diputado.
Hace unos días el músico dio a conocer a través de las redes sociales el cierre de su hotel ubicado en la ciudad de Jerez, Zacatecas, debido a amenazas por parte de miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). De acuerdo con el cantante, los responsables de amenazar al personal son conocidos en el pueblo. En su mensaje pidió a las personas tener cuidado al viajar a Zacatecas, no hacer “confianza”, aunque sugirió que lo mejor era no visitar el estado. Pero esta no es la única situación que ha sufrido Flores, pues en 2012 vivió una experiencia mucho más peligrosa cuando fue secuestrado por miembros del Cártel del Golfo. De acuerdo con el diario La Unión de Jalisco, las autoridades investigaron que el plagio fue en represalia por componer un narcocorrido a Iván Velázquez Caballero, alias “El Talibán”, jefe de Los Zetas en Zacatecas.
Para lograr su liberación, se dijo que pagó cinco millones de pesos ($441,680 dólares). Ese mismo año a Marco Flores y a todos los integrantes de la Banda Jerez se los llevó la Procuraduría General de la República para ser interrogados sobre quién estaba en una fiesta y quién los contrató para actuar. El evento, realizado en Monclova, Coahuila, presuntamente sirvió para festejar el cumpleaños de Heriberto Lazcano Lazcano, alias “El Lazca”. La celebración se vio interrumpida cuando la policía federal allanó el concierto en un intento de arrestar al líder de los Zetas, pero logró escapar.