Ciudad de México, 11 nov (EFE).- El Gobierno mexicano anunció este viernes que vigila el litigio sobre el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que permite a los migrantes que llegaron a Estados Unidos siendo menores de edad vivir y trabajar sin ser deportados.
El Gobierno estadounidense comenzó a aplicar el DACA bajo una regla formal del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y sigue aceptando solicitudes nuevas, aunque no puede procesarlas mientras el programa continúa en litigio.
El programa original se inició en agosto de 2012 durante el Gobierno de Barack Obama (2009-2017), pero en 2017 el entonces presidente Donald Trump ordenó su cancelación.
La implementación de esta regulación se encuentra suspendida de forma temporal debido a una decisión de la Corte Federal del Distrito Sur de Texas tomada el pasado 14 de octubre, dijo el Gobierno mexicano en un comunicado.
No obstante, recalcó el Ejecutivo, la implementación de DACA y la situación de sus beneficiarios “se mantiene sin cambios” y Estados Unidos seguirá renovando los permisos de las personas inscritas en el programa, por lo que no podrán ser deportados.
Debido a las numerosas querellas judiciales que han llevado el asunto hasta el Tribunal Supremo de Estados Unidos, DACA ha seguido operando y ha protegido de la deportación a unas 800.000 personas que eran menores de edad cuando fueron traídas de forma irregular a Estados Unidos.
De todos modos, el Gobierno mexicano lamentó que el futuro del programa permanezca incierto, en especial para los “480.560 mexicanos, que representan casi el 81 % del total de los beneficiarios con permisos vigentes, quienes constituyen un grupo diverso de profesionistas que aportan al desarrollo” de EE.UU.
“La falta de una solución migratoria permanente para los ‘dreamers’ (beneficiarios de DACA) les coloca en una situación de vulnerabilidad e incertidumbre”, añadió el documento.
Por todo ello, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Unidad para América del Norte y la Dirección General de Protección Consular y Planeación Estratégica, dará seguimiento al litigio “con pleno respeto a la soberanía de ese país y a sus respectivos procesos”.
La Embajada mexicana en EE.UU. y la red de consulados seguirá brindando asistencia y asesoría legal para ofrecer diagnósticos migratorios a los beneficiarios de DACA, “con el fin de salvaguardar los derechos de las personas mexicanas en Estados Unidos, sin importar su condición migratoria”.