Ciudad de México, 8 jun (EFE).- La icónica banda Los Tigres del Norte es un referente para muchos artistas de música regional mexicana que hoy traspasan las fronteras del país. Para ellos, con 50 años de carrera y sin intención de dejar los escenarios, ser inspiración “se siente muy bonito”, dicen en entrevista con EFE.
“Estamos muy contentos de que seamos un grupo ejemplo a seguir. Se siente muy bonito, ya que tenemos más de 50 años trabajando y hemos dado a conocer nuestra música, que es la música norteña”, cuenta Eduardo Hernández, uno de los hermanos que componen la agrupación, que ofrecerá dos conciertos en la Arena Ciudad de México el viernes y el sábado.
“Nos sentimos muy halagados de que la juventud se fije en lo que uno hace”, ahonda.
En los últimos años, la música regional mexicana ha logrado hacerse hueco en las listas de éxitos, hasta llegar a ocupar los primeros puestos a nivel mundial.
Artistas como Grupo Frontera, Banda MS, Natanael Cano o Peso Pluma suenan ya en los hogares de muchos países del mundo.
Pero esto es fruto de décadas de trabajo de agrupaciones como Los Tigres del Norte, quienes confiesan que cuando iniciaron su carrera, en 1968, la música norteña estaba muy denostada.
Aun así, lograron hacerse con su público, que hoy es diverso e incluye a adultos y jóvenes. Incluso, de estos últimos, algunos que decidieron dedicarse a la música gracias a ellos.
Es por eso que se sienten orgullosos, dicen, de haber abierto una puerta.
“Que esta juventud con sus canciones también tenga éxito, se lo merecen, y ojalá en un futuro haya más compañeros que puedan interpretar música”, añade Eduardo.
ESCUCHAR AL PÚBLICO
Y precisamente es el amor a su público lo que los ha llevado tan lejos, pues relatan que siempre escuchan y tratan de deducir lo que puede gustarle a sus seguidores, como es el caso de estos conciertos que ofrecerán en la capital mexicana.
“Nuestros seguidores son todo, son los jefes de jefes. Ellos son los que nos marcan la pauta, no solo cuando nos estamos presentando, también cuando nos bajamos del escenario, cuando pensamos qué queremos grabar, qué mensaje le queremos mandar”, explica otro de los hermanos, Luis Hernández.
Él ahonda que, además, cuando pasan tiempo libre también se topan con “fans”, quienes se acercan como si fueran parte de la familia, una familia en la que la música lleva décadas siendo la protagonista.
EN CONSTANTE EXPANSIÓN
Los Tigres del Norte se han atrevido a experimentar con otros géneros, incluso el rock, aunque siempre manteniendo la esencia norteña.
Gracias a esto se expandieron en mercados que nada tienen que ver con el regional mexicano, pero donde los aceptan por su calidad musical y las historias de sus corridos, tales como “Contrabando y traición” o “Jefe de jefes”.
Además, adecúan sus letras al momento, como hicieron en “Pan y miel”, que se estrena el viernes.
“Es una canción muy a la vanguardia, muy al estilo de como se comunican los jóvenes hoy”, añade Luis.
Después de tantos veces que han pisado escenarios de todo el mundo, algunos de los cinco hermanos -Jorge, Eduardo, Hernán, Luis y Óscar- mantienen rituales que les ayudan, consideran, a salir al ruedo con ganas, motivación y seguridad.
Hernán, por ejemplo, cuenta que cada vez que sale de su casa se persigna frente a la fotografía de su padre, fallecido en 1986. Con esto, le pide que le vaya bien no solo a él, sino también a sus hermanos, a quienes se quedan en casa y también da “una pasadita” a toda la familia.
También piensan en su madre, a quien perdieron el año pasado.
“Es importante creer en lo que te hace feliz y en los que te dejaron que te querían y te siguen cuidando desde el cielo”, comparte Hernán.
Para terminar, Jorge, quien confiesa que le habría encantado haber podido cantar junto a Pedro Infante, asegura que están “ansiosos de que lleguen el viernes y el sábado para estar en la Arena”.