Ciudad de México, 23 ene (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, rechazó este martes las acusaciones de Alejandro Encinas, extitular de la Comisión para la Verdad del caso Ayotzinapa, sobre que abogados del Ejército interceden por los militares involucrados en la desaparición de los 43 jóvenes.
“No estoy de acuerdo con lo que dijo (Alejandro) Encinas”, expresó el mandatario mexicano durante su rueda de prensa matutina.
López Obrador argumentó que “lo lamentable es” que el Poder Judicial proteja a quienes participaron en la desaparición de los jóvenes en septiembre de 2014 en el sureño estado de Guerrero.
El gobernante mexicano respondió así a las declaraciones del exfuncionario federal, quien aseveró que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) intervino a favor de ocho militares involucrados en el caso Ayotzinapa que una jueza liberó el fin de semana por “falta de pruebas”.
La decisión permitió a los militares seguir su proceso en libertad condicional, al pagar 50.000 pesos (unos 2.900 dólares).
“Es más lamentable aún que abogados de la @SEDENA litiguen contra la investigación que encabeza el presidente de México”, denunció en X Encinas, quien fue subsecretario de Derechos Humanos (2018-2023) durante la mayoría del sexenio actual.
Al respecto, López Obrador afirmó que envió una carta a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, para advertirle sobre la liberación de los militares.
Y aseguró que estas acusaciones responden a dos cosas: opositores que buscan el desprestigio del Ejército mexicano porque “no quieren que haya una institución independiente” y también para hacerlo “quedar mal”.
El mandatario volvió a arremeter contra organizaciones de derechos humanos, en especial contra la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Desde el principio está politizando este asunto, desde que estaba de director ejecutivo de la CIDH (Emilio) Álvarez Icaza, y tengo pruebas para sostener que dejaron libres a quienes participaron en la desaparición de los jóvenes y las organizaciones, supuestamente de derechos humanos, se quedaron callados”, enfatizó.
No obstante, prometió que su Gobierno seguirá con la investigación al sostener que no está encubriendo a nadie.
Según la desacreditada versión del Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018), conocida como ‘verdad histórica’, policías corruptos detuvieron a los 43 estudiantes de Ayotzinapa en septiembre de 2014, los asesinaron e incineraron en un basurero.
En 2018, López Obrador reabrió las pesquisas y creó una Comisión de la Verdad, a cargo de Encinas, que en 2022 concluyó que fue un crimen de Estado con la participación de funcionarios de todos los niveles, incluyendo militares.
Sin embargo, las familias de los desaparecidos denuncian que persiste la falta de voluntad del Gobierno y que las presiones del Ejército han impedido nuevos avances.