Ciudad de México, 13 abr (EFE).- El líder del gobernante partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en el Senado de México, Ricardo Monreal, anunció este jueves que el Gobierno liquidará la agencia de noticias del Estado Notimex después de que sus trabajadores hayan estado cerca de tres años en huelga, así como la banca de desarrollo Financiera Rural.
“Estoy enterado que habrá dos organismos a liquidar en los próximos días, uno es Financiera Rural y otro organismo de medios de comunicación, que la semana que entra lo sabrán”, expuso Monreal a preguntas de los medios de comunicación, quien asintió al ser preguntado si se refería a Notimex.
La liquidación de ambas empresas del Estado, indicó Monreal, se llevarán a cabo porque “son mecanismos que la ley establece”.
Esta misma mañana, el Sindicato Único de Trabajadores de Notimex (SutNotimex) recordó en un mensaje publicado en Twitter que llevan 1.148 días en huelga y señaló al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador por su “omisión” en el caso.
“La razón asiste a las y los trabajadores de Notimex, en huelga desde hace más de tres años, a pesar de la omisión desde el Gobierno de México”, expusieron los empleados de la agencia.
No obstante, Monreal, quien también es presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, aseguró que la empresa y los trabajadores serán liquidados conforme a la ley.
“Todo conforme a la ley, todo se respeta. Ya está muy avanzada esta propuesta”, dijo en una escuetas declaraciones.
El conflicto laboral en la agencia estatal mexicana de noticias comenzó en febrero de 2020 por el posible despido injustificado de al menos 200 colaboradores al interior de Notimex, principalmente mujeres, lo cual fue reprochado y defendido por el SutNotimex, sindicato que fue sustituido por la empresa a la llegada de su nueva directora, Sanjuana Martínez.
El último enfrentamiento entre los periodistas de Notimex y el Gobierno se dio el pasado agosto, cuando los 20 corresponsales de la agencia en el extranjero pidieron a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que interviniese en la resolución de la huelga.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, sostuvo que el Estado no intervendría en la huelga y las autoridades mexicanas tampoco lograron resolver en conflicto sindical.