Naciones Unidas, 14 ago (EFE).- La misión de la ONU en Mali (Minusma) va a adelantar un día su retirada del norte del Mali, concretamente de la región de Tombuctú, “debido a la situación de creciente inseguridad en la región”, que se ha traducido en dos ataques el domingo contra convoyes de la ONU.
Según dijo hoy el portavoz Stéphane Dujarric en su rueda de prensa diaria, los ataques dejaron seis heridos entre los cascos azules burkineses, que no corren peligro, tras ser atacados cuando evacuaban su base de Ber.
El portavoz pidió “a las partes” -sin nombrar específicamente al gobierno maliense, que fue el que exigió la salida de la Minusma del país a partir del 1 de julio- que “garanticen desplazamientos seguros de la misión de paz durante todo el periodo de retirada” mientras se lleva a cabo la entrega de las bases a las autoridades del país.
Sobre esta transferencia de campamentos, el portavoz dio a entender que no hay todavía un protocolo establecido para regular este traspaso, y la ONU y el gobierno de Bamako trabajan en un documento que sirva de guía.
Pero sí dejó claro que “las armas y el equipamiento (militar) partirán”, mientras que elementos de mobiliario u otros podrían ser entregados al gobierno maliense.
Tras diez años de presencia en el país y con uno de los mayores contingentes de cascos azules del mundo, la Minusma era una de las misiones con mayor despliegue de bases, oficinas y vehículos, por lo que la evacuación de todos estos elementos va a suponer un enorme esfuerzo logístico que costará más incluso que un año de funcionamiento de la misión, explicaron recientemente expertos de la ONU.
El gobierno de Mali quería una evacuación acelerada de todos los bienes de la Minusma en solo tres meses, y accedió a un plazo de seis acordado con la ONU, pero en la sede central de Nueva York se considera que ese plazo es poco realista y la operación costará al menos un año hasta que se haya completado.
La retirada anticipada de la Minusma de Ber se produce en medio de la reanudación de tensiones entre el Ejército maliense y el colectivo exrebelde Coordinación de los Movimientos del Azawad (CMA) que acusó ayer sábado al Ejército del país y a sus aliados del grupo de mercenarios rusos Wagner de atacar el viernes pasado sus posiciones en Ber, que están bajo su control.
Este ataque denunciado por la CMA coincide también con otro ataque el mismo día y en la misma zona de grupos leales a Al Qaeda en el Sahel contra un dispositivo del Ejército maliense que estaba de camino para recuperar el campamento de la Minusma, y se saldó con 6 militares muertos además de 24 yihadistas neutralizados.