Ciudad de México, 28 feb (EFE).- ¿Cómo ve la sociedad a una mala madre? Esa es la pregunta que se hace la adaptación al teatro de la novela ‘Casas Vacías’ (2019), de la escritora mexicana Brenda Navarro, planteada también por la directora de la obra, Mariana Giménez Videla, responsable de llevar a escena esta historia que muestra la crítica que sufren las mujeres “pulverizadas” que pierden un hijo.
“Generalmente se pulveriza a las mujeres, o es buena madre o mala madre, y no, nunca es ni una cosa ni la otra”, explica la directora argentina -en una entrevista con EFE- antes del estreno este viernes de la obra en el Foro Shakespeare de la Ciudad de México.
Maltratadas, silenciadas, violentadas, incomprendidas, así es como las actrices Mariana Villegas y Paula Watson representan a sus personajes. Ponen su cuerpo “generosamente” en una actuación muy física porque sino “¿para qué hacemos la representación?”, afirma Giménez Videla.
Dos mujeres tienen un hijo, las dos lo pierden, a las dos se lo roban, ese es el inicio de esta historia de dos madres que nunca se encuentran, y cuando lo hacen es en un “vértice fatal”, una pierde al niño y la otra se lo lleva.
Puede que el personaje de Villegas sea de “aparente villana”, al ser la madre que se roba un niño y destroza la vida de toda una familia, pero para la actriz, incluso bajo esta tesitura, siempre hay un punto de comprensión y entendimiento.
“Yo nunca voy a defender que una madre se robe a un niño, pero puedo empatizar con su situación, por lo que está pasando, por cómo se siente”, profundiza la intérprete sobre cómo se preparó para este papel.
En el caso de Watson, su papel era el de una mujer más “fría” y con “menos referencias” a las que poder ajustarse, pues confesó “no ser madre”, por lo que desconoce la experiencia de dar a luz a un hijo y también lo que significa perderlo, entonces intentó hacer “una gran labor” para ajustarse a esa realidad.
Una obra arriesgada
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Últimamente las novelas e historias hechas por mujeres mexicanas están siendo adaptadas con más frecuencia al teatro e incluso a la gran pantalla, como ‘Temporada de Huracanes’ (2017) de Fernanda Melchor o ‘Ceniza en la boca’ (2022) de la propia Navarro, sin embargo, su éxito sigue siendo una incógnita.
“Desde luego es un riesgo hacer esta obra, pero desde que un amigo me dijo que tenía que leer la novela supe que quería adaptarla (…) Me dejó en ‘shock’, tenía que llevarla a los escenarios para que el público sintiera lo mismo”, contó Irene Azuela, productora de la adaptación y actriz también de la serie inspirada en el libro ‘Como agua para chocolate’ de Laura Esquivel.
Hace cinco años que Azuela se enfrentó por primera vez a la novela de Navarro, un momento crítico en su vida, ya que en esa época estaba intentado tener un segundo hijo, y fueron las palabras que habitan ‘Casas Vacías’ las que le hicieron reflexionar sobre cómo “se juzga a muchas madres” a la hora de decidir si quieren tener hijos, si “tener más es mejor”.
Por eso, Azuela se decidió a llevar esta obra a la escena del teatro mexicano, para que las madres y mujeres que la vean se sientan escuchadas en “aquellos pensamientos que muchas veces nos atraviesan y no llegamos nunca a pronunciar”.
