Washington, 5 ago (EFE).- La jueza prohibió al expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) publicar en sus redes sociales las pruebas en su contra que ha recabado la fiscalía en la imputación por su intento de anular las elecciones de 2020 y haber instigado el asalto al Capitolio.
La magistrada Tanya Chutkan dio el visto bueno a la petición hecha por el fiscal especial Jack Smith, quien solicitó una orden de confidencialidad después de que el republicano hiciera varias publicaciones en redes sociales sobre su proceso judicial.
“El acusado y sus abogados no divulgarán la evidencia a ninguna persona o entidad que no forme parte de su defensa o que no sean posibles testigos”, escribió la jueza en un documento judicial consultado este sábado por EFE.
Chutkan subrayó que todo el material que la fiscalía proporcione durante el caso quedará sujeta bajo una “orden de protección” y el equipo de Trump solo lo podrá utilizar para preparar su defensa.
El fiscal especial había advertido el viernes a la jueza de una publicación en redes sociales de Trump en la que el republicano amenazaba: “¡SI USTEDES VAN A POR MÍ, YO IRÉ A POR USTEDES!”
Para Smith, esto demuestra que existe la posibilidad de que el exmandatario “comience a publicar detalles” en redes sociales del caso, dañando el proceso judicial y afectando a la imparcialidad del jurado, que solo debe atender a las pruebas que se le presenten durante el juicio.
Por ello había pedido una orden de confidencialidad, algo común en otros juicios en el Distrito de Columbia, que permite al acusado consultar la evidencia en su contra para preparar su defensa pero previene “su difusión y uso inadecuado”.
“Tal restricción es particularmente importante en este caso porque el acusado ha emitido previamente declaraciones públicas en las redes sociales con respecto a testigos, jueces, abogados y otros”, argumentó.
Trump compareció el jueves ante el tribunal federal del Distrito de Columbia donde se declaró no culpable de los cuatro delitos que se le imputan por haber intentado revertir las elecciones de 2020 en las que perdió contra Joe Biden y haber instigado el asalto al Capitolio.
Es la tercera imputación penal contra el expresidente, acusado además en Nueva York por el soborno a la actriz porno Stormy Daniels y en Miami por haberse llevado ilegalmente documentos clasificados al dejar el poder.
Los procesos judiciales en su contra, sin embargo, no han mermado la popularidad de Trump, gran favorito en las primarias republicanas de cara a las elecciones de 2024, en las que aspira a batirse de nuevo con Biden.