Washington, 21 jul (EFE).- La defensa del ultraderechista Steve Bannon, quien fuera asesor del expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021), finalizó este jueves sus argumentos orales sin haber llamado a testigos ni haber presentado pruebas de la inocencia de su cliente, acusado de desacato al Congreso.
La defensa y la acusación volverán a comparecer mañana, viernes, para pronunciar sus argumentos finales, antes de que el jurado inicie sus deliberaciones.
Los abogados de Bannon, acusado de negarse a comparecer ante el comité legislativo que investiga el asalto del 6 de enero de 2021 al Capitolio, decidieron no llamar a ningún testigo a declarar, ni presentar pruebas de la inocencia del exasesor, argumentando que la Fiscalía no ha demostrado la culpabilidad de su cliente.
También defendió la decisión de Bannon de no declarar en el juicio, ya que el juez no ha aceptado como válida su pretensión de que un supuesto “privilegio ejecutivo” emitido por Trump impedía al ultraderechista hablar con el comité.
El propio comité del asalto al Capitolio ya avisó en octubre de 2021 que Bannon no estaba cubierto por esa protección ya que en el momento del ataque no ocupaba ningún cargo público.
La defensa tampoco pudo llamar como testigo al presidente del comité legislativo, el demócrata Bennie Thompson, que contrajo covid esta semana y por las reticencias del juez federal Carl Nichols, que instruye la causa.
Antes del finalizar la vista de hoy, Nichols recordó a los miembros del jurado que no deben consumir información sobre el asalto al Capitolio. Precisamente este jueves está previsto que el comité legislativo que investiga el suceso vuelva a celebrar una audiencia pública en horario de máxima audiencia.
El juicio por desacato contra Bannon se está desarrollando con una gran rapidez, a pesar de que sus abogados habían buscado una demora en el proceso poniendo en duda algunas de las pruebas presentadas.
La Fiscalía llamó a testificar a solo dos personas. Una de ellas, la abogada general del comité del 6 de enero, Kristin Amerling, dijo al jurado que se advirtió a Bannon de posibles cargos penales después de que su letrado avisara de que no iba a cumplir con su primera citación.