Washington, 18 ene (EFE).- Investigadores en Estados Unidos anunciaron el miércoles que se cancela el estudio de la única vacuna contra el VIH que estaba en las última etapa de ensayos clínicos.
La vacuna estaba siendo estudiada por la farmacéutica Janssen, parte de la multinacional Johnson y Johnson, junto con el gobierno de EE.UU. y se congela en la fase tres de los ensayos clínicos, informó el Instituto Nacional de Salud (National Institute of Health, NIH) norteamericano en un comunicado.
Los ensayos, que se estaban llevando a cabo en tres continentes y contaban con unos 3.900 voluntarios, encontraron que la vacuna “era segura pero no brindaba protección” contra el contagio de VIH, explicó el comunicado.
La investigación de esta vacuna, conocida como Mosaico, comenzó en 2019 y contó con la participación de hombres cisgénero y personas transgénero, de entre los 18 hasta los 60 años de edad.
La decisión de detener el estudio fue tomada después de que una junta independiente de monitoreo de datos determinó que la vacuna no cumplía con los requisitos.
Según explica el NIH, la vacuna se basaba en un “mosaico” de inmunógenos, que buscaban inducir una respuesta en el sistema inmune para combatir una amplia variedad de variantes del VIH.
El principal epidemiólogo de EE.UU., Anthony Fauci, dijo que la noticia de la suspensión del estudio es “decepcionante” pero que no se debe desistir en la búsqueda por una vacuna contra el VIH, según recogieron medios estadounidenses.
En esto coincidió Mitchell Warren, director ejecutivo de AVAC, una organización para la prevención del VIH, quien también expresó su descontento con el resultado de la investigación.
“La cruda verdad es que la ciencia para el desarrollo de una vacuna contra el VIH es extremadamente difícil, pero este no es el momento de dar marcha atrás a las investigaciones en curso”, dijo el activista en un comunicado.
Más de 38 millones de personas viven actualmente con el virus del VIH en todo el mundo, de acuerdo con la cifras de la Organización de Naciones Unidas. Solo en 2021 se reportaron un millón y medio de nuevas infecciones en todo el planeta.