Washington, 17 oct (EFE).- La candidata demócrata a la Casa Blanca, la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris, afirmó este jueves que su rival republicano, el expresidente Donald Trump, “no sabe de lo que habla” cuando se trata de la salud de las mujeres.
“Cuando escuchas a Donald Trump hablar, cada vez resulta más claro que no tiene ni idea de lo que está diciendo cuando se trata de la salud de las mujeres en Estados Unidos”, afirmó Harris durante un mitin en Green Bay (Wisconsin).
Era el segundo mitin de Harris este jueves en Wisconsin, uno de los siete estados considerados clave llamados a decidir las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre.
La vicepresidenta proyectó en el mitin declaraciones de Trump sobre la salud reproductiva de las mujeres, como cuando se autodefinió como “el padre” de la reproducción in vitro en una entrevista televisada.
“A veces se vuelve aún más increíble. ¿Qué se supone que significa eso? Todo cuando él es, por cierto, el responsable de que esté en riesgo (la reproducción in vitro) en primer lugar”, afirmó Harris.
La jornada en Wisconsin coincidió con el lanzamiento de un nuevo anuncio llamado “Trabar Duro” por parte de la campaña dirigido a familias latinas en la que han invertido 370 millones de dólares para su emisión en los estados clave.
“Todas nuestras familias merecen una oportunidad no solo de sobrevivir, sino de salir adelante”, afirma Harris, en inglés, en el anuncio.
Por su parte, el candidato a vicepresidente de Harris, el gobernador Tim Walz, hizo campaña en Carolina del Norte, otro de los siete estados clave, acompañado del expresidente Bill Clinton (1993-2001).
Trump en Nueva York
El magnate neoyorquino invirtió el jueves en su ciudad, un feudo demócrata en el que no tiene posibilidad alguna de victoria en las presidenciales.
El estado de Nueva York, sin embargo, es clave para determinar el control de la Cámara de Representantes y los republicanos han mejorado sus resultados aquí en las recientes elecciones.
El expresidente visitó una barbería en el humilde barrio del Bronx y respondió durante media hora preguntas de varias personas.
Por la noche, Trump acudió a la cena benéfica de Al Smith, a la que anualmente acude la 'jet set' neoyorquina y que recauda dinero para causas católicas.
En su discurso, que se supone debe ser satírico, pero también autosatírico, Trump hizo chistes pasados de vueltas sobre los líderes demócratas con los que se ganó aplausos y abucheos.
“Solía pensar que los demócratas estaban locos por decir que los hombres tienen la regla, pero luego conocí a Tim Walz”, dijo sobre el candidato a vicepresidente.
Al líder del Senado, el demócrata Chuck Schumer, sentado a su lado en la cena, le dijo: “Teniendo en cuenta lo 'woke' que se ha vuelto tu partido, si Kamala pierde, todavía tienes la oportunidad de convertirte en la primera mujer presidenta”.
Además, en presencia del arzobispo de Nueva York, blasfemó sobre el anterior alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, también presente en la cena: “Fue un alcalde terrible. Me importa una mierda si esto es comedia o no”.
Mañana, a 18 días de los comicios, la campaña de Trump vuelve a los estados clave con un mitin del expresidente en la ciudad de Detroit, en Míchigan.
