Washington, 19 dic (EFE).- El gigante tecnológico Google acordó pagar $700 millones y hacer cambios a su plataforma de descarga de aplicaciones para Android, Google Play, para resolver una demanda antimonopolio presentada por varios estados de EE.UU.
La decisión fue anunciada por la propia compañía y llega después de que un jurado federal de San Francisco dictaminara que Google violó las leyes de libre competencia, que perjudicando los intereses tanto de desarrolladores de videojuegos como de los usuarios.
Google entregará $630 millones a un fondo de conciliación para los consumidores y otros $70 millones a las decenas de estado que presentaron las acciones legales contra la empresa tecnológica.
Además del desembolso, Google acordó permitir que los desarrolladores de aplicaciones para móviles cobren a los usuarios directamente por sus servicios, en vez de Play Store, que cobra una comisión del 30% por gestionar los pagos.
A su vez, Google facilitará a sus usuarios la descarga de aplicaciones fuera de su plataforma de aplicaciones.
“Android y Google Play brindan opciones y oportunidades de innovación que otras plataformas con las que competimos simplmente no ofrecen”, destacó el vicepresidente de Google en un comunicado en el que dio detalles sobre el acuerdo.
“Nos complace llegar a un acuerdo que se basa en esa base y esperamos realizar estas mejoras que ayudarán a evolucionar Android y Google Play para beneficio de millones de desarrolladores y miles de millones de personas en todo el mundo”, agregó.
La empresa de videojuegos Epic Games, creadora de Fortnite, acusó a Google ante un tribunal en California de prácticas antecompetitivas al cobrar altas comisiones por descarga y compartir escasos márgenes de beneficios.
Un jurado le dio la razón a la compañía y el pasado 11 de diciembre emitió una sentencia que podrá redefinir los derechos que protegen a las empresas de software que usan en Play Store para llegar a los usuarios.
El gigante tecnológico se enfrenta a otro juicio antimonopolio en Washington tras la acusaciones del Departamento de Justicia de EE.UU. que apuntan a que Google supuestamente abusó de su hegemonía como motor de búsqueda en internet pagando miles de millones de dólares para alcanzar esta posición de privilegio.