Davos (Suiza), 17 ene (EFE).- La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, dijo este miércoles en el Foro de Davos que es necesario acelerar la imposición de un creciente precio a las emisiones de carbono para financiar la lucha contra la crisis climática.
Georgieva, que participó en un panel junto con el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga; el consejero delegado del grupo Ingka, Jesper Brodin; la científica climática Katharine Hayhoe y el multimillonario suizo André Hoffmann, aseguró que el precio del carbono debe llegar a 85 dólares por tonelada en 2030.
“No podemos acelerar la descarbonización lo suficiente sin imponer un precio al carbono con un incremento predecible. Tiene que llegar a 85 dólares para 2030”,
La directora gerente del FMI también insistió en la desaparición inmediata de los subsidios que los Gobiernos conceden al sector petrolero.
“Estoy cansada de escuchar que (la lucha contra la crisis climática) es demasiado cara, que no se sabe dónde se puede encontrar el dinero. Estamos hablando de 5 billones de dólares para el final de la década. El año pasado, el mundo gastó 1,3 billones de dólares en subsidios directos a los combustibles sólidos”, explicó.
Georgieva apostó por eliminar estos subsidios “y utilizarlos para apoyar la acción climática”.
Según sus cálculos, con los precios actuales de las emisiones de carbono si los Gobiernos recaudasen un 25 % del total se generarían 800.000 millones de dólares, mientras que si el porcentaje llega al 50 % la cifra aumentaría hasta los 1,5 billones.
“Tomemos los recursos de donde hacen daño y pongámoslos donde ayudan”, añadió.
La economista búlgara añadió que ante el fracaso de los Gobiernos de alcanzar las contribuciones necesarias para luchar contra la crisis climática “es necesario presionarlos”.
Por eso, dijo, el FMI se compromete a “estar implicado de forma sistemática con el sector privado, otras organizaciones (internacionales) y los Gobiernos” para luchar contra la crisis climática.