Ciudad de México, 3 oct (EFE).- La Fiscalía General de la República (FGR) de México informó este jueves que solicitó el apoyo de la Interpol y asistencia jurídica internacional a Guatemala con relación a la muerte de seis migrantes de Egipto, Perú y Honduras por parte de militares en el estado de Chiapas, frontera sur del país.
La noche del pasado martes, agentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) intentaron detener tres vehículos sospechosos en la frontera de México con Guatemala, mientras los ocupantes se dieron a la fuga, desatando una persecución.
Según el informe de las autoridades militares, durante el operativo, los agentes castrenses fueron atacados y, al repeler la agresión, lograron detener una camioneta con 33 personas a bordo.
Cuatro de ellas ya habían fallecido en el lugar, mientras que dos más perdieron la vida en el hospital debido a las heridas.
La Fiscalía mexicana confirmo que, por estos hechos, los agentes del Sedena involucrados fueron puestos bajo arresto y están bajo investigación.
En tanto, la Fiscalía Especializada en materia de Derechos Humanos (FEMDH) desplegó un equipo de agentes del Ministerio Público, policías, peritos y psicólogos en la ciudad de Tapachula, Chiapas, para llevar a cabo las diligencias necesarias.
Además de la solicitud a la Interpol, las autoridades mexicanas requirieron información al Instituto Nacional de Migración (INM) sobre el caso y pidieron la colaboración de los consulados de los países de origen de las víctimas, la mayoría de los cuales provienen de Cuba, Nepal, Pakistán, India y Egipto.
Por la mañana, la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, abordó el incidente en su primera declaración pública desde que asumió el cargo. Durante un evento oficial en el Campo Militar Marte, en Ciudad de México, la mandataria aseguró que las Fuerzas Armadas respetarán los derechos humanos durante su mandato, reafirmando que no se tolerarán violaciones a las garantías constitucionales.
“Tengan la certeza de que por nuestro origen humanista, nunca emitiré orden alguna que vulnere el orden constitucional o los derechos humanos del pueblo de México”, subrayó Sheinbaum en el marco de su primer saludo oficial como “comandanta suprema de las Fuerzas Armadas”.