Toronto (Canadá), 1 feb (EFE).- La fiscalía canadiense ha imputado a dos agentes de la Policía Montada de Canadá con homicidio por la muerte en 2017 de un indígena cuando estaba bajo custodia policial.
La fiscalía canadiense también ha acusado a otros tres agentes policiales con obstrucción en relación con la muerte de Dale Culver, un indígena de 35 años.
Las imputaciones, que han sido calificadas de inusuales por los expertos, se producen después de que la Oficina de Investigaciones Independientes de la provincia de Columbia Británica, en el oeste del país, emitiese en mayo de 2020 un informe en la que recomendó a la fiscalía la imputación de los cinco agentes.
La muerte de Culver se produjo cuando agentes de la Policía Montada intentaron detenerlo en la localidad de Prince George, a unos 800 kilómetros al noreste de la ciudad de Vancouver.
Culver, al que los agentes consideraban responsable de dañar vehículos aparcados en la calle, fue rociado con gas pimienta y colocado en un coche policial.
Poco después el hombre, que tenía tres hijos, empezó a tener dificultades para respirar. El detenido murió en un hospital horas después de su arresto.
La muerte de Culver junto con la de otro indígena, Everett Patrick, que también falleció en Prince George cuando estaba bajo custodia de la Policía Montada, así como otros enfrentamientos entre indígenas y agentes policiales, provocaron en 2020 protestas en las que se denunció la violencia policial contra la población aborigen.
La imputación de los cinco agentes de la Policía Montada de Canadá por la muerte de Culver se produce el mismo día que en Estados Unidos se celebró el funeral por Tyre Nichols, un afroamericano que fue apaleado hasta la muerte por cinco policías en la ciudad de Memphis (EE.UU.).
Ayer, tras la difusión del vídeo que recoge el apaleamiento mortal de Nichols, la directora de la Policía Montada, Brenda Lucki, emitió un comunicado en el solicitó que los responsables de su muerte sean juzgados.
El comunicado añadió que la Policía Montada de Canadá reconoce que “es necesario un mayor trabajo de transparencia, gobernanza de la Policía, modernización y mejor capacitación”.