Nueva York, 12 may (EFE).- Los familiares de varias víctimas del tiroteo racista ocurrido hace casi un año en un supermercado de Búfalo (Nueva York), donde fueron asesinadas diez personas negras, demandaron este viernes a las principales empresas de redes sociales de EE.UU. y las acusaron de contribuir a la radicalización del autor.
La demanda, interpuesta en la Corte Suprema del estado de Nueva York, argumenta que el autor, Payton Gendron, un joven blanco de 18 años, “fue radicalizado por los algoritmos” de las redes sociales que utilizaba y que le alimentaban con “contenidos cada vez más racistas, antisemitas e instigadores de violencia”.
Los familiares de tres víctimas y una superviviente -hubo tres heridos- están respaldados por tres organizaciones legales, que indicaron en una nota que Gendron retransmitió en directo el ataque por la red social Twitch y que su capacidad de poder divulgarlo fue “un factor clave para convencerlo” de seguir adelante.
Están acusadas en la demanda las tecnológicas Meta, Snap, Alphabet, Discord, Reddit y Amazon -que opera Twitch-, tres empresas del negocio de las armas involucradas en el ataque y los padres del autor.
Gendron fue condenado este pasado febrero a cadena perpetua por un delito de terrorismo doméstico y diez de asesinato tras declararse culpable.
El día de la condena dijo sentirse arrepentido, y sus abogados consideraron que el odio racista que le motivó partió de las redes sociales y que el crimen fue facilitado por el fácil acceso a armas de asalto.
Los denunciantes señalan que los algoritmos de las redes “maximizaron” la interacción de Gendron con esas plataformas y generaron “la correspondiente facturación por publicidad a las empresas”, además de proveerle “el entrenamiento, el acceso al equipamiento y el conocimiento para planear y ejecutar la masacre”.
La demanda arroja luz sobre el involucramiento del autor del tiroteo en las redes y sostiene que usó Discord para crear un “plan detallado para matar a gente negra”, con un análisis profundo de las armas que usaría, y durante meses fue dejando constancia de su desarrollo.
El día del ataque invitó a otros usuarios a una sala de chat de Discord en la que había puesto un enlace a una retransmisión en vivo en Twitch, una declaración personal y un diario que había escrito “para justificar su violencia e inspirar futuros tiroteos”.
La retransmisión de Twitch duró unos 24 minutos antes de ser suspendida por la propia red social, y los dos últimos minutos recogieron casi la duración entera del tiroteo, que fue visto por dos decenas de usuarios, mientras que el vídeo fue posteriormente publicado en otras plataformas “online”, agrega la nota.