Washington, 27 feb (EFE).- El empleo ilegal de mano de obra infantil en Estados Unidos ha aumentado un 69 % desde 2018, informó este lunes el Departamento de Trabajo, que anunció nuevas medidas para combatir la explotación laboral de menores, muchos de ellos inmigrantes.
“En el último periodo fiscal el Departamento encontró que 835 compañías investigadas habían empleado a más de 3.800 menores de edad en violación de las leyes laborales”, señaló en un comunicado conjunto con el Departamento de Salud y Servicios Humanos.
El secretario de Salud, Xavier Becerra, dijo en la nota que todos los niños en este país, sean cuales sean sus circunstancias, merecen “la protección y el cuidado” que uno espera para sus propios hijos.
En Estados Unidos, hay un flujo de niños migrantes que proceden de América Latina “huyendo de la violencia y la pobreza y que en su mayoría no tienen familiares” en el país de acogida, indicó el texto.
“Continuaremos haciendo nuestra parte para proteger el bienestar de los menores no acompañados, proporcionándoles el cuidado apropiado mientras están bajo nuestra custodia”, añadió Becerra.
La multa máxima que se puede imponer por una infracción de las leyes laborales es de 15.138 dólares por menor, lo que “no es suficiente” para disuadir a las grandes compañías que obtienen el lucro, según el comunicado.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, añadió en una rueda de prensa que la decisión de crear un grupo de trabajo intergubernamental para combatir la explotación infantil deja claro que el Ejecutivo “seguirá investigando y haciendo que las empresas rindan cuentas”.
“También necesitamos que el Congreso actúe, que provea los recursos que esta Administración ha solicitado desde hace tiempo para aplicar mejor las leyes sobre trabajo infantil”, sostuvo Jean-Pierre, quien subrayó que el trabajo infantil es “inaceptable” y “un abuso”.
El anuncio se difunde un día después de que el diario The New York Times informara en un reportaje de que muchos menores migrantes llegados a EE.UU. sin la compañía de sus padres acaban realizando trabajos que nadie quiere en condiciones muy duras.
En concreto, el diario habló con más de 100 menores migrantes en 20 estados que trabajan en mataderos de Delaware, Misisipi y Carolina del Norte; como techadores en Florida y Tennessee; o como serradores de madera en turnos nocturnos en Dakota del Sur.
A mediados de este mes el Departamento de Trabajo anunció la resolución de uno de los casos más grandes en la historia de la agencia acerca de trabajo infantil ilegal.
La firma Packers Sanitation Services (PSSI) pagará más de 1,5 millones de dólares en multas por haber empleado ilegalmente a al menos 102 niños sometidos a condiciones peligrosas en 13 plantas de procesamiento de carne.
Los inspectores del Gobierno encontraron que los niños, con edades de 13 a 17 años, trabajaban en turnos nocturnos en la limpieza de equipos industriales peligrosos, incluidas sierras mecánicas, con el uso de compuestos químicos tóxicos. Al menos tres de ellos sufrieron lesiones.
Actualmente el Departamento de Trabajo tiene en marcha más de 600 investigaciones de posibles empleos ilegales de menores de edad.