Ciudad de México, 16 nov (EFE).- El progreso social en México lleva seis años estancado y ha registrado su segunda peor puntuación desde que se tienen registros en el Índice de Progreso Social (IPS), con una estimación de 63 puntos sobre 100.
El documento, presentado este miércoles por la organización fines de lucro “México ¿Cómo vamos?” con datos correspondientes a 2021, reflejó que el país tan solo obtuvo peores resultados en 2015, cuando registró 62,9 puntos, “lo que significa un estancamiento en el progreso social observado en el país en los últimos seis años”.
“El informe pretende evaluar lo que a la gente realmente le importa: si su casa está bien construida, si tiene acceso a electricidad y si puede mandar a estudiar a sus hijos”, explicó Sofía Ramírez, directora general de “México ¿Cómo vamos?” en la presentación del documento.
El IPS en México alcanzó su cota más alta en 2018, después de tres años de avance; a partir de entonces, la puntuación del país fue disminuyendo hasta 2021.
Pese a que entre 2020 y 2021, debido a la pandemia del coronavirus, el lastre al desarrollo fue mayor, en 2019 ya se empezó a observar un retroceso.
El IPS contempla tres dimensiones para calcular el desarrollo social: las necesidades humanas básicas -nutrición, sanidad, agua, vivienda y seguridad-; las oportunidades -derechos personales, libertad, inclusión y acceso a educación superior-; y los fundamentos del bienestar -acceso a conocimientos básicos e información, bienestar y calidad medioambiental-.
Las dos primeras dimensiones sufrieron un retroceso en 2021, debido al incremento de la mortalidad derivado de la pandemia del coronavirus, entre otros factores.
Sin embargo, los fundamentos del bienestar sí progresaron, aunque de forma “insuficiente” respecto al descenso sufrido en 2021, incidió el informe.
DOS DE CADA TRES ESTADOS RETROCEDEN
El estancamiento se refleja especialmente entre 2020 y 2021, cuando dos de cada tres de los estados de México sufrieron disminuciones en su desarrollo social, con especial afectación en las entidades federativas del sureste del país: Oaxaca, Guerreo y Chiapas.
Por el contrario, los estados con mayor progreso social en 2021 fueron Ciudad de México, Aguascalientes y Nuevo León.
El documento reflejó que 24 de los 32 estados sufrieron disminuciones en su desarrollo social, siete registraron un incremento y únicamente Coahuila no presentó cambios.
Sin embargo, tomando como referencia 2018, la caída es todavía mayor, pues desde entonces 30 entidades federativas sufrieron retrocesos sociales.
El documento estableció una relación entre los lugares con menor flujo comercial y menor adaptación al comercio internacional y aquellos con menor progreso social.
“(En 2018) se alcanzó el último pico de la actividad económica y del crecimiento de la inversión en el país, por lo que es evidente que el crecimiento sostenido es una condición necesaria para el programa social”, añadió el informe.
Para finalizar, el secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), José Nabor, exigió “políticas públicas diferenciadas para atender requerimientos muy diferenciados”, apelando a la diferencia socioeconómica, territorial y de desarrollo entre los estados mexicanos.