Ciudad de México, 2 ago (EFE).- El documental “La dama del silencio: El caso Mataviejitas”, que relata la historia de las víctimas de Juana Barraza, una mujer que asesinó a por lo menos 16 ancianas entre finales de los 90 y principios de los 2000, recuerda los “vicios” y “fallas” en la investigación, algunos de los que continúan dándose a día de hoy.
Producido por Mezcla y ya disponible en Netflix, el documental “es un viaje al pasado”, pero “remite al México presente”.
“Es un ejercicio de memoria, pero también de recordarnos que hoy en día seguimos con los mismos problemas en el país”, dijo en entrevista con EFE Laura Woldenberg, productora del documental.
El caso, que según Woldenberg podría suceder también hoy, muestra un México muy diferente en el que las manifestaciones de la violencia no eran iguales a las de ahora.
Pero la médula, que es el sistema de justicia y cómo se percibe a las víctimas, continúan siendo algunos de los problemas más importantes del país, “y este documental logra encapsularlo”, consideró la productora.
¿QUIÉN ERA LA MATAVIEJITAS?
Juana Barraza, sentenciada en 2008 a 759 años de prisión por matar a 16 personas, cometió sus crímenes en la Ciudad de México, donde en diferentes zonas acompañaba a las ancianas a su casa haciéndose pasar por enfermera u ofreciéndoles asistencia y, tras ganarse su confianza, accedía a sus viviendas y una vez dentro las asfixiaba.
El documental relata su modus operandi, pero se centra en las víctimas, no solo en las ancianas asesinadas y sus familiares, sino también en otras personas que fueron acusadas de sus crímenes y la persecución de las autoridades a colectivos como las mujeres trans y trabajadoras sexuales alegando que una de ellas era la autora.
“Para nosotros, la historia que importaba era justamente la del caso y todas las víctimas alrededor de este, no solo las asesinadas, sino las víctimas del sistema de justicia en México, que tiene muchas deficiencias y a día de hoy hay personas en la cárcel con pruebas muy débiles que siguen cumpliendo su condena por algo que no cometieron”, sentenció Woldenberg.
UNA NUEVA MIRADA A UN CASO HISTÓRICO
Fue por lo anterior y con ese enfoque que decidieron hacer el documental de un caso que fue muy mediático y sonado durante muchos años, por lo que buscaron aportar algo nuevo a la conversación con una mirada diferente.
Se adentraron en una extensa bibliografía e hicieron una profunda investigación, liderada por la periodista Karla Casillas.
La directora del documental, María José Cuevas, explicó que el equipo de investigación accedió a los expedientes del caso por primera vez -algo que dio un panorama más amplio- y a todo el archivo de información periodística.
Al tener toda esa información, compartió, les quedó claro que tenían que poner el foco en lo que no se conocía, “en lo invisible” del caso.
Es decir, en asuntos que todavía no se habían dado a conocer pero sobre todo en aquellos que, aunque salieron en su momento, habían sido olvidados, como las acusaciones a personas que no tenían nada que ver con el caso.
Para terminar, Cuevas dijo que el documental también contiene una reflexión final de cómo este tipo de personajes se convierten en leyendas.
“Viven dentro del imaginario y no nos ponemos a pensar que detrás de este apodo hay muchísimo dolor, se nos olvida el dolor que deja”, concluyó.