Nueva York, 1 oct (EFE).- Los diagnósticos de cáncer de mama en Estados Unidos han crecido un 1 % cada año desde 2012 a 2021 y de manera más pronunciada entre las mujeres menores de 50 años y un 1,6 % anual entre mujeres hispanas, según un estudio de la Sociedad Americana del Cáncer.
El informe, publicado este martes, revela que en esta década los mayores incrementos de este tipo de cáncer se produjeron entre mujeres menores de 50 años (un 1,4 % anual), frente al aumento anual del 0,7 % entre mujeres de 50 años o más.
También se observan diferencias por razas y etnias: en el caso de las mujeres asiático-estadounidenses y de las islas del Pacífico menores de 50 años, los diagnósticos de cáncer de mama en estos diez años crecieron más que entre la población blanca de la misma edad, con un aumento de la incidencia del 2,6 % al año.
Del mismo modo, los diagnósticos de este cáncer incrementaron en este periodo de tiempo un 1,6 % anual entre mujeres hispanas, y un 1 % anual en el caso de las mujeres blancas, negras y americanas y nativas de Alaska.
La Sociedad Americana del Cáncer indica que las muertes por esta enfermedad han caído un 10 % en la última década y un 44 % desde 1989 “debido a los avances en la detección temprana”, lo que supone que se han evitado más de 500.000 fallecimientos por cáncer de mama.
No obstante, también hay diferencias entre razas en cuanto a la mortalidad: aunque entre las mujeres afroamericanas la incidencia de este cáncer es un 5 % menor que entre mujeres blancas, su tasa de mortalidad es un 38 % superior a la de este grupo, en gran parte debido a “diagnósticos tardíos y un menor acceso a un tratamiento de calidad”.
Del mismo modo, las mujeres indígenas americanas y nativas de Alaska tienen una tasa de mortalidad un 6 % superior a la de las mujeres blancas pese a tener un 10 % menos de incidencia de este tipo de cáncer que este sector.
Las tasas de supervivencia del cáncer de mama para las hispanas son en gran medida comparables a las de las blancas. Sin embargo, se ha demostrado que las tasas de supervivencia para las poblaciones con una mayor proporción de inmigrantes están sobreestimadas debido al seguimiento incompleto de sus récords médicos.
Según el informe, 1 de cada 8 mujeres será diagnosticada de cáncer de mama invasivo a lo largo de su vida, y 1 de cada 43 (un 2,3 %), morirá por esta enfermedad.
El Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de Estados Unidos -un panel de expertos en atención primaria y prevención- establece que la edad adecuada para comenzar a realizarse mamografías era de 40 años, mientras que la Sociedad Americana del Cáncer recomienda hacerse estos estudios periódicos a los 45 años.