Nueva York, 1 nov (EFE).- El alcalde de Nueva York, Eric Adams, será juzgado por corrupción en un tribunal federal de la ciudad el 21 de abril de 2025, dos meses antes de las elecciones primarias del Partido Demócrata, en las que planea presentarse como candidato.
El juez, Dale Ho, dijo hoy en una audiencia que “es importante que el público tenga una respuesta” sobre el caso antes de celebrarse estos comicios, según recogen los medios locales.
Adams fue acusado en septiembre de soborno, fraude electrónico y conspirar para pedir y aceptar contribuciones extranjeras para su campaña electoral, cargos por los que se declaró no culpable.
Los abogados de Adams habían pedido programar el juicio antes de abril por las “graves preocupaciones” del Partido Demócrata con respecto al caso del alcalde, el primero de la historia moderna de la ciudad en ser imputado durante su mandato.
“Hay un momento a principios de abril en que la gente sabe quién está en la papeleta. O se presenta con esto (el juicio) colgando sobre su cabeza o con esto resuelto”, expresó uno de sus letrados, Alex Spiro, en la audiencia de hoy, citado por los medios.
Spiro apuntó que defiende la ejecución de un juicio rápido para cualquier acusado, pero especialmente para el alcalde, dado “el ciclo electoral”.
El juez también indicó hoy que tomará una decisión sobre la petición de los abogados de desestimar un cargo de soborno, por el que se acusa a Adams de aceptar viajes de lujo gratis pagados por el gobierno turco a cambio de presionar al Departamento de Bomberos para abrir un consulado de este país en un edificio de Manhattan.
Ante esto, otro de los abogados de Adams, John F. Bash, alegó que este cargo no encaja en la definición legal de soborno.
Además, según la defensa, la fiscalía no ha aportado pruebas más allá de “reuniones y llamadas” del alcalde que no definen “algo concreto” ni “relacionado con el poder gubernamental”.
Eric Adams, un exoficial de policía de 64 años, es el segundo alcalde de raza negra en la historia de la ciudad, aficionado a los golpes de efecto. Aunque se presentó por el Partido Demócrata, su línea política es percibida como más cercana a los republicanos.