Washington, 11 ago (EFE).- El Gobierno de EE.UU. confirmó este viernes que ya se ha descargado todo el crudo que había en el buque FSO Safer, varado en el Yemen, evitando así un gran desastre medioambiental.
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y el secretario de Estado, Antony Blinken, informaron en sendos comunicados de que se ha completado la operación en el mar Rojo y que la ha llevado a cabo la ONU.
Blinken señaló que el FSO Safer, una embarcación de 47 años de antigüedad, estaba en riesgo de provocar un vertido que hubiera sido cuatro veces más grande que el del Exxon Valdez en 1989, que provocó en Alaska uno de los mayores desastres del mundo de este tipo.
El vertido “hubiera costado decenas de miles de millones de dólares de limpiar y hubiera sido una catástrofe medioambiental, económica y humanitaria para la región”, dijo el titular de Exteriores.
Advirtió de que, pese a que se ha evitado una crisis “inmediata”, todavía falta por retirar el barco del lugar, por lo que la ONU necesita apoyo financiero de la comunidad internacional y del sector privado para alcanzar los 22 millones de dólares que necesita para terminar su tarea.
Por su parte, Sullivan recordó que el FSO Safer sirvió como terminal petrolera flotante para las exportaciones de crudo del Yemen hasta 2014, cuando debido al conflicto en el país árabe se detuvieron las ventas de petróleo yemení en el exterior y se abandonaron las labores de mantenimiento del barco.
“Años de abandono pusieron el barco en riesgo de un vertido inminente que hubiera perjudicado a toda la región del mar Rojo y más allá de ella”, señaló el asesor de seguridad nacional.
Según datos de Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), un vertido de petróleo de este buque hubiera afectado a más de 17 millones de personas y su limpieza hubiera tenido un coste estimado de 20.000 millones de dólares.