Toronto (Canadá), 20 feb (EFE).- Estados Unidos y Canadá se enfrentan este jueves en la final del torneo Confrontación de las 4 Naciones de hockey sobre hielo, un partido al que a la clásica rivalidad entre los dos equipos se une ahora las tensiones causadas por las amenazas de anexión lanzadas por Donald Trump.
Trump se insertó en la disputa deportiva este jueves con un mensaje en su red social, Truth Social, en el que espoleó al equipo estadounidense a derrotar a Canadá a la vez que insistió en trolear al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y en amenazar con la anexión al país vecino.
El presidente estadounidense escribió que hablaría hoy con los jugadores estadounidenses para que derroten a Canadá, “que con IMPUESTOS MUCHO MENORES Y MAYOR SEGURIDAD, algún día, quizás pronto, se convertirá en nuestro querido y muy importante 51 estado”.
Trump dijo que seguirá el partido por televisión e invitó al “gobernador Trudeau” a verlo junto a él. Por su parte, Trudeau ha preferido mantenerse en silencio.
El partido, que se disputará en el estadio TD Garden de Boston (EE.UU.), es el segundo que los dos equipos disputan en el torneo, reservado para jugadores inscritos en la Liga Profesional de Hockey sobre Hielo (NHL) y en el que también han participado Finlandia y Suecia.
En el partido que EE.UU. y Canadá disputaron el pasado sábado en Montreal (Canadá), con la presencia de Trudeau en las gradas, los estadounidenses se impusieron por 1-3.
Sin embargo, más allá del resultado final, el encuentro será recordado porque en los nueve primeros segundos del partido se produjeron tres peleas a puñetazos entre los jugadores, para delicia de los aficionados.
Esas peleas fueron iniciadas por los jugadores estadounidenses.
Los canadienses tienen ahora la oportunidad no sólo de vengar la derrota del sábado sino defender el honor de todo el país, acosado desde hace meses por las amenazas de Trump de convertir “a la fuerza económica” Canadá en el 51 estado de EE.UU.
El martes, uno de los jugadores canadienses, Brandon Hagel, resumió el espíritu con el que Canadá se plantea la final al declarar que el equipo juega para representar la bandera canadiense y no para lucir bien ante las cámaras.
Mientras, en Canadá, y a modo de aperitivo del partido de hoy, las principales televisiones del país no dejan de repetir imágenes de las peleas del sábado, el regocijo de las gradas del estadio Bell Centre de Montreal y los abucheos que estallaron cuando sonó el himno nacional de EE.UU. antes del inicio del encuentro.