Ciudad de México, 13 mar (EFE).- El canciller mexicano Marcelo Ebrard afirmó este lunes que la lucha contra el tráfico de fentanilo ha costado cientos de bajas de las fuerzas federales mexicanas y, a pesar de ello, legisladores y exfuncionarios del partido republicano en Estados Unidos han culpado a México por la crisis generada por esa droga.
Además de ello, dijo, han pedido una intervención militar estadounidense en territorio mexicano, señaló un comunicado emitido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México.
Este lunes en Washington, Ebrard sostuvo una reunión de trabajo con el embajador Esteban Moctezuma y los 52 cónsules de México en la Unión Americana.
Dijo también que “en la lucha contra el fentanilo, México ha sido el principal aliado de Estados Unidos” y prueba de ello es que, en lo que va del sexenio, “México ha incautado una cifra récord de más de seis toneladas de fentanilo, lo que ha evitado miles de millones de dosis mortales”.
“La lucha contra el tráfico de fentanilo ha costado cientos de bajas de fuerzas federales mexicanas”, se apuntó en la nota.
“Con este costo de vidas humanas, ¿cómo es que estos señores se atreven a cuestionar nuestro compromiso o, peor aún, a pedir una intervención en nuestro país?”, señaló.
Ebrard pidió al embajador Moctezuma y a los cónsules sostener reuniones informativas con la comunidad mexicana y actores políticos, y rendir un informe semanal, esto “para no dejar que se consolide una narrativa basada en mentiras que dañe a México”, dijo.
“No permitiremos que nos atropellen”, aseguró Ebrard ante el embajador y los 52 cónsules en EE. UU.
Tras el secuestro la pasada semana de cuatro estadounidenses en la fronteriza ciudad de Matamoros (Tamaulipas), de los cuales dos fueron asesinados, los republicanos presentaron dos proyectos de ley para considerar a los carteles mexicanos como grupos terroristas para así autorizar el uso del Ejército para combatirlos.
Estas propuestas legislativas prohibirían a los integrantes del crimen organizado la entrada a Estados Unidos, autorizaría a congelar sus bienes y prohibiría a cualquier persona ayudarles de forma consciente, entre otros mecanismos.
Ante ello, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador amenazó con hacer campaña en contra de los republicanos de cara a las próximas elecciones y dijo que la iniciativa es “irresponsable, una ofensa al pueblo de México y una falta de respeto a nuestra soberanía”.
“Si no actuáramos como lo estamos haciendo, México sería un infierno, porque estaría en mano de la delincuencia de cuello blanco y de la delincuencia organizada, habría, como lo hubo en el tiempo de (Felipe) Calderón (presidente entre 2006-2012), un narcoestado”, señaló la semana pasada.