Los Ángeles (EE.UU.), 12 dic (EFE).- La feria de videojuegos E3, en su momento considerada la más grande de su sector a nivel mundial, anunció este martes su cancelación definitiva tras haber programado su última edición en Los Ángeles el pasado mes de junio y anularla de imprevisto.
“Después de más de dos décadas de E3, cada edición más grande que la anterior, ha llegado el momento de decir adiós. Gracias por los recuerdos”, publicó Entertainment Software Association (ESA), entidad organizadora del evento desde 1995, en la red social X.
Echa el cierre así el mayor escaparate de la industria de los videojuegos en el que cada año se daban cita las principales empresas desarrolladoras para testear sus nuevos lanzamientos, actualizaciones y complementos o extensiones para sus juegos más vendidos.
La entrega del año pasado ya había sido pospuesta para el pasado 13 y 16 de junio, fecha en la que tampoco se celebró un evento lastrado, según la organización, por una falta de “interés necesario” para acoger una feria que demostrase el “tamaño, la fuerza y el impacto” de la industria del videojuego global.
Desde 2019, cuando contó con más de 65.000 asistentes, E3 no había vuelto a desarrollarse con normalidad porque el coronavirus frustró la entrega de 2020 y al año siguiente se apostó por una modesta versión digital.
Las políticas de ESA en los últimos tiempos permitían que fuera un evento abierto al público, pero hasta 2017 las personas que deseaban acudir a esta cita acogida por el Centro de Convenciones de Los Ángeles debían demostrar su vinculación con la industria.
Grandes compañías con parte de su negocio enfocado en los videojuegos como Microsoft, Sony, Ubisoft y Nintendo se han decantado en años recientes por celebrar sus propios eventos -en la mayoría de los casos digitalmente- para promocionar sus novedades demostrando la tendencia a comprar videojuegos en formato ‘online’.
“Cualquiera de estas grandes empresas puede tener su propio escaparate individual (…) Eso es emocionante para nuestra industria y significa que es una oportunidad para que exploren cómo atraer a nuevas audiencias”, afirmó este martes el consejero delegado de ESA, Stanley Pierre-Louis, en declaraciones a The Washington Post.