Ciudad de México, 27 dic (EFE).- Una delegación de Estados Unidos liderada por el secretario de Estado, Antony Blinken, y el de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, llegó este miércoles a la capital mexicana para abordar el repunte migratorio en la frontera binacional con el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Los secretarios, acompañados de Elizabeth Sherwood-Randall, asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, aterrizaron en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), según informó Roberto Velasco, jefe de la Unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
“En representación de la canciller Alicia Bárcena, recibimos en el AIFA al secretario Blinken y al secretario Mayorkas. Dimos la bienvenida a la delegación de Estados Unidos para fortalecer nuestra cooperación y atender las causas de raíz de la migración”, publicó Velasco en la red social X (antes Twitter).
Los funcionarios estadounidenses tienen programada una reunión con López Obrador en el Palacio Nacional “para dialogar sobre cooperación bilateral en materia de movilidad humana, gestión regular de flujos migratorios y expansión de vías legales para la migración”, detalló la SRE.
“Nuestros países mantienen un diálogo permanente y respetuoso, para beneficio de sus pueblos”, afirmó la Cancillería.
La visita ocurre mientras este diciembre se han registrado cifras históricas de personas que buscan entrar a Estados Unidos en la frontera con México, donde la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense (CBP, en inglés) confirmó el martes la llegada de más de 2,2 millones de migrantes de enero a noviembre.
Además, sucede durante el avance de una caravana migrante que partió en Nochebuena con casi 10.000 personas como la más numerosa del año.
Pese a reportes de la prensa internacional, que señalan que la delegación estadounidense reclamará un mayor control migratorio, López Obrador rechazó durante la rueda de prensa matutina la idea de que Blinken le propondrá un endurecimiento del control migratorio.
“No (pedirán endurecer los controles migratorios) porque ellos (el Gobierno de Joe Biden) saben muy bien cuáles son nuestras propuestas, siempre hemos hablado de que hay que atender las causas, que lo ideal es que se ayude a países pobres”, respondió el mandatario a pregunta expresa en su rueda de prensa matutina.