Ciudad de México, 8 feb (EFE).- El cantante mexicano de corridos tumbados, Chuy Montana, fue asesinado la tarde del miércoles en una carretera de la ciudad fronteriza de Tijuana (noroeste de México), confirmó este jueves el sello discográfico Street Mob Records, del que era parte el artista.
“En nombre de Street Mob Record, lamentamos profundamente el fallecimiento de nuestro colega y hermano Chuy Montana. Nos solidarizamos con su familia durante este momento de dolor”, expresó la disquera en un breve comunicado publicado en sus redes sociales.
Según medios locales, el cuerpo del cantante fue encontrado al mediodía del miércoles en la carretera Tijuana-Rosarito, luego de ser secuestrado por un grupo armado.
De acuerdo con la información, Montana intentó huir de un automóvil en movimiento, lo que dejó marcas y golpes en su cuerpo. Además, habría recibido varios disparos con una pistola calibre 9 milímetros.
Jesús Nolberto Cárdenas Velázquez, el nombre real de Montana y quien tenía 19 años, comenzó su carrera en la calle, pues se dedicaba a cantar en el cruce fronterizo con Estados Unidos de la garita de San Ysidro, en Tijuana.
Allí se encontró un día con Jesús Ortiz, vocalista del exitoso grupo de regional mexicano Fuerza Regida, quien impulsó su carrera y en cuya disquera grabó varias canciones como ‘Porte de Scarface’, ‘Ramos Buchones’ y ‘Qué bendición’.
Los llamados corridos tumbados son un subgénero musical derivado del corrido, aunque estos poseen tintes de música urbana como rap, hip-hop, trap y e incluso reguetón, además de que las letras son explícitas y hacen apología a distintos delitos, como el tráfico de drogas, robo o uso de armas.
En México, artistas como Peso Pluma y Natanael Cano son representantes de este subgénero del regional mexicano que ha acaparado las miradas de la industria musical y lo ha convertido en uno de los más escuchados del país.