Nueva York, 17 ene (EFE).- Un tribunal federal de San Francisco (California, EE.UU.) inició este martes un juicio contra Elon Musk y Tesla en el que varios inversores buscan compensaciones multimillonarias por un tuit de 2018 en el que el máximo ejecutivo del fabricante de vehículos eléctricos dijo que había reunido fondos para sacar a la empresa de la bolsa, algo que nunca se materializó.
La sesión de hoy fue dedicada a la selección del jurado, que podría concluir en la jornada de hoy o continuar todavía a lo largo de la semana.
Los accionistas que presentaron esta demanda colectiva aseguran que esas declaraciones les hicieron perder miles de millones de dólares por los vaivenes que causaron en la cotización de la firma, y sostienen que Musk mentía cuando hizo ese anuncio.
Ahora, más de cuatro años después, el empresario debe convencer a un jurado de que decía la verdad o de que el precio de los títulos pudo variar por otras causas.
“Estoy considerando sacar a Tesla de bolsa a 420 dólares. Financiación asegurada”, decía el controvertido tuit en el que Musk hacía referencia al precio por acción que podía ofrecer en la operación, que habría valorado a la empresa en unos 72.000 millones de dólares.
CUESTA ARRIBA PARA MUSK
En principio, Musk y Tesla parten en desventaja, pues el juez encargado del caso, Edward Chen, ya consideró probado el año pasado que el tuit en cuestión y otros que publicó después eran “falsos y engañosos”.
Además, ya en 2018 Musk fue acusado por la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés) de fraude por su publicación en Twitter y el empresario aceptó como sanción una multa de 20 millones de dólares y dejar al menos por tres años de ser presidente del consejo de administración de la compañía, aunque continuó siendo su consejero delegado.
En su denuncia, la SEC acusaba a Musk de decir de manera falsa que tenía la posibilidad de retirar a Tesla de la bolsa al haberse asegurado “una transacción multimillonaria” y sólo a falta de un voto de los accionistas.
“La realidad y la verdad es que Musk ni siquiera había debatido, y mucho menos confirmado, los términos clave del acuerdo con ninguna fuente de financiación en potencia”, afirmaba el documento de la SEC.
Los inversores que han presentado la demanda compraron o vendieron acciones de Tesla en los días inmediatamente posteriores al anuncio del jefe de la empresa y buscan compensaciones que no se han especificado por una situación que, aseguran, les costó en conjunto miles de millones de dólares.
El tuit de Musk hizo que la cotización de Tesla subiese con fuerza, para luego caer unos días después cuando medios de comunicación comenzaron a informar de que en realidad no tenía esa financiación asegurada.
El multimillonario empresario, por su parte, ha insistido en que tenía un acuerdo con el fondo soberano saudí para apoyar su plan de sacar a la empresa de la bolsa, pero no está claro que eso fuese cierto o que pueda demostrarlo.
Entre los argumentos que su defensa ha dejado entrever en documentos previos al juicio figura la idea de que las oscilaciones que se vieron en la cotización de Tesla pudieron deberse a declaraciones ciertas, como que Musk estaba considerando sacar a la firma de la bolsa.
TRES SEMANAS DE JUICIO
El proceso arrancó hoy en San Francisco con la selección del jurado y el juez dijo que se espera que se complete en aproximadamente tres semanas, con presentación de pruebas y argumentos, hasta principios de febrero, más el tiempo necesario para las deliberaciones del jurado.
Recientemente, los abogados de Musk trataron sin éxito de trasladar el juicio de California a Texas por la supuesta “negatividad local” que hay en la zona de San Francisco contra el magnate, en particular tras su compra de Twitter y su decisión de despedir a miles de empleados de esa empresa, que tiene su sede en la ciudad.
Según aseguraban, esa situación podría perjudicar al acusado e impedir que se celebre un proceso justo, pero el juez rechazó la solicitud.