Tucson (AZ), 12 may (EFE).- Grupos proinmigrantes en Arizona expresaron molestia debido a que el presupuesto estatal firmado hoy viernes por la gobernadora Katie Hobbs no incluyó el fondo de 40 millones de dólares prometido para otorgar becas a estudiantes indocumentados.
“Tenemos emociones mixtas. El presupuesto tiene cosas positivas para la comunidad hispana, pero no está la promesa hecha por la gobernadora a los soñadores de otorgar fondos para becas estatales a jóvenes indocumentados”, dijo a EFE José Patiño, vicepresidente de educación del grupo Aliento.
La promesa de un fondo para que jóvenes indocumentados pudieran seguir su educación superior fue hecha por la gobernadora demócrata durante su campaña electoral y en su primer informe de gobierno en enero.
“Siempre vemos que nos hacen muchas promesas y al final nos excluyen, algo lamentable ya que creo que en gran parte la gobernadora ganó las elecciones en noviembre pasado debido al apoyo que le dio nuestra comunidad latina y a la propuesta 308, que también estaba en la boleta”, dijo Patiño.
La ahora Ley 308 otorga matrículas a jóvenes indocumentados como residentes del estado en universidades y colegios comunitarios. Sin embargo debido a su estatus migratorio, estos jóvenes no son elegibles para becas federales y estatales.
Patiño indicó que se encuentran actualmente hablando con las universidades para ver de qué forma se podrían otorgar becas a los jóvenes indocumentados y a estudiantes amparados bajo el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
Por su parte, Karina Ruiz, directora de la Coalición del Acta del Sueño en Arizona, reconoció el trabajo de la gobernadora en favor de la comunidad latina en el estado, pero también lamentó que no se incluyeran los fondos para ayudar a jóvenes indocumentados que quieren seguir sus estudios a nivel superior.
El presupuesto estatal bipartidista de 17.800 millones de dólares incluye un fondo de 150 millones para enfrentar el problema de la vivienda accesible en el estado, algo que beneficiará a la comunidad latina.
También incluye una inyección de 300 millones de dólares para la educación pública, algo que beneficiará a los latinos, que representan más del 50 % de los estudiantes en escuelas públicas en Arizona.
“En el presupuesto estatal hubo algunas victorias y otras derrotas”, dijo Ruiz.
Durante las negociaciones del presupuesto se trató de agregar de último momento una iniciativa que otorgaría licencias de conducir a jóvenes estudiantes indocumentados, pero fue rechazada por legisladores republicanos, quienes siguen siendo mayoría en el Legislativo estatal.
Por su parte Hobbs dijo en un comunicado que reconoce que no todos obtuvieron lo que querían del presupuesto, pero se comprometió a seguir trabajando por el bienestar de todos los arizonenses.
El nuevo presupuesto estatal entrará en vigor el próximo 1 de julio.