Miami, 1 feb (EFE).- El colombiano Piero Antonio Lubo-Barros, alias “Nostradamus”, fue sentenciado en una corte federal de Florida a 17 años de prisión por su papel como supervisor de una red trasnacional que distribuyó cocaína a EEUU, informaron fuentes judiciales.
Lubo-Barros, de 52 años, que fue extraditado a Estados Unidos desde Costa Rica en noviembre de 2021, recibió una condena de 17 años y 6 meses de prisión tras haberse declarado en agosto pasado culpable de conspiración para distribuir cocaína a sabiendas de que iba a ser importada a EEUU, según señaló la Fiscalía federal del Distrito Medio de Florida.
De acuerdo a documentos de la corte, Lubo-Barros, que fue arrestado en enero de 2021 en Costa Rica, donde vivía con otra identidad, supervisó una red trasnacional que transportó cocaína a través de América Latina, el Caribe, Europa y directamente a Estados Unidos.
Lubo-Barros discutía “el envío de cocaína por tierra y mar, incluida la negociación de envíos de drogas, el establecimiento de nuevas rutas de tráfico de drogas, el pago de sus cómplices”, además de encargarse de “las transferencias de divisas, las deudas de drogas y los métodos utilizados para evitar la aprehensión y la detección por las fuerzas de seguridad”, explicó la Fiscalía federal.
La cocaína que distribuía esta red contaba con símbolos y marcas de identificación, las cuales estaban presentes en lotes de esta droga recuperadas por las fuerzas de seguridad en Nueva York, Pensilvania y Florida..
Según la Fiscalía, en 2018 fue decomisada cocaína a bordo del crucero Island Princess cuando atracó en Fort Lauderdale, en el sureste de Florida.
Uno de los cómplices de Lubo-Barros en esta red criminal, el también colombiano Gerardo Gomez-Lubo, extraditado a EE.UU. desde Panamá, fue sentenciado a 15 años de prisión en junio de 2022.
Desde 2018 existía una acusación de conspiración para distribuir cocaína contra Gerardo Gómez-Lubo y Piero Antonio Lubo-Barros en el Distrito Judicial Medio de Florida.
Gómez-Lubo fue arrestado el 1 de septiembre de 2019 cuando llegaba al Aeropuerto Internacional de Tocumen, en Panamá, a pedido de Estados Unidos, que solicitó su extradición.
Panamá aprobó la entrega del colombiano el 4 de febrero de 2021 mediante un decreto presidencial.