Washington, 7 jul (EFE).- El director del Servicio Secreto de Estados Unidos -cuerpo encargado de proteger entre otros al presidente del país-, James Murray, anunció este jueves que dejará el cargo a finales de mes, y la prensa local reveló que se irá a trabajar a la empresa de la red social Snapchat. En un comunicado, el Servicio Secreto indicó que Murray se retirará del cuerpo el próximo 30 de julio tras 27 años de servicio, tres de ellos como director desde que fuera nombrado para ese puesto en mayo de 2019 por el entonces presidente Donald Trump. El diario The Washington Post citó una fuente anónima del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. según la cual Murray ya habría aceptado un cargo de seguridad en Snap, la empresa propietaria de Snapchat. En un comunicado, el presidente del país, Joe Biden, y su esposa, Jill, dijeron estar “increíblemente agradecidos” por el servicio que Murray les ha prestado protegiéndolos durante los últimos años y aseguraron que este “representa el significado de poner el deber por encima de uno mismo”. Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo en rueda de prensa que la salida de Murray lleva meses preparándose y que no tiene nada que ver con la polémica que ha rodeado al Servicio Secreto durante los últimos días en relación a su actuación en la jornada del 6 de enero de 2021. La semana pasada, una exempleada de la Casa Blanca durante el mandato de Donald Trump (2017-2021) dijo ante el comité que investiga el asalto al Capitolio que Trump ordenó al conductor de su limusina dirigirse a la sede del Congreso y que cuando este se negó, el entonces presidente trató de hacerse con el control del volante. Fuentes anónimas llevan desde el momento mismo de la declaración desmintiendo a la prensa este hecho y aseguran que el Servicio Secreto está en disposición de dar testimonio bajo juramento negando lo contado por la exempleada, algo que por el momento no ha ocurrido.