Washington, 22 nov (EFE).- Un grupo de 16 senadores demócratas y republicanos pidieron este martes al secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, explicaciones sobre el supuesto rechazo del país a enviar drones de combate de tipo MQ-1C Gray Eagle a Ucrania.
Su misiva, encabezada por el progresista Joe Manchin y el conservador Joni Ernst, deja claro que ese tipo de armamento tiene el potencial de decantar el rumbo del conflicto a favor de Ucrania y dotaría a sus fuerzas de mayor letalidad contra la ofensiva rusa.
La prensa estadounidense ha publicado este mes que Washington se niega a mandar a Kiev esos drones de combate para evitar una escalada de la tensión con Rusia y ha apuntado también que estudia cómo rebajar su potencia en caso de hacerlo.
Los senadores subrayan que aunque los avances de los ucranianos en el campo de batalla son esperanzadores, la voluntad de Rusia de conquistar Ucrania sigue “intacta” y la entrega de armamento “letal” para estabilizar la defensa ucraniana se mantiene “urgente”.
Según recuerdan, el ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Reznikov, y la embajadora ucraniana en Estados Unidos, Oksana Markarova, han solicitado repetidas veces la entrega de MQ-1C Gray Eagle, que en opinión de los senadores se complementan bien tanto con los drones turcos TB-2 como con los sistemas de lanzacohetes HIMARS.
Una victoria rusa en Ucrania, advirtieron, “dañaría de forma significativa la seguridad y prosperidad estadounidense”.
El grupo pide a Lloyd que para el 30 de noviembre como muy tarde ofrezca su respuesta sobre los riesgos de escalada de la tensión identificados por el Departamento de Defensa y sobre cómo pueden ser mitigados, entre otras dudas que el uso de ese material suscita a las autoridades estadounidenses.
Desde el principio de la invasión rusa el pasado 24 de febrero, Estados Unidos ha movilizado más de 18.600 millones de dólares en ayuda defensiva a Ucrania que incluye drones “fantasma” y sistemas de defensa antiaérea.