Los Ángeles, 22 nov (EFE).- El mexicano Luis Eduardo González García, que se hizo pasar por un exitoso empresario en Chicago para distribuir droga y enviar millones de dólares de ganancias a México, fue sentenciado a pasar 30 años en la cárcel, informó el Departamento de Justicia.
La acusación del Gobierno de Estados Unidos contra González asegura que estableció una “sofisticada” red de almacenes y empresas fachada que se hacían pasar por negocios legítimos para distribuir cocaína en Chicago y suburbios cercanos.
La red se habría extendido hasta los estados de Texas y Georgia.
De 2012 a 2017, González fue responsable de la distribución de miles de kilogramos de cocaína en EE.UU. y del lavado de más de 50 millones de dólares en ganancias de la venta de la droga.
Las empresas, que decían vender muebles, bocadillos, detergentes para ropa u otros artículos, operaban sus propios sitios web y contrataban empleados para ocultar la distribución de cocaína.
Las drogas se ocultaron principalmente en cajas que supuestamente contenían los artículos que las empresas fachada pretendían vender y eran transportadas desde México por vía terrestre para después de ser regresadas con el dinero en efectivo.
Según las autoridades, el narcotraficante tenía yates en lugares tropicales, caros relojes de oro y camionetas, y vivía una lujosa vida hasta que fue arrestado en 2018 por la agencia antidrogas DEA en el aeropuerto de Chicago.
González García, de 55 años y nacido en Monterrey, México, se declaró culpable a principios de este año de cargos federales de conspiración de drogas y lavado de dinero.
En su carta de defensa, González dijo que se metió en el narcotráfico cuando su negocio de cultivo de tomates fracasó y tuvo un momento de “mal juicio”, según información citada por ABC 7.
Además de la sentencia de prisión de 30 años, el juez federal Ronald A. Guzmán multó a González García con 1,5 millones de dólares.