Washington, 6 sep (EFE).- La empresa fabricante de cigarrillos electrónicos Juul pagará casi medio millón de dólares para poner fin a una investigación en su contra en Estados Unidos centrada en sus estrategias de marketing.
El acuerdo, en el que Juul se compromete al pago de 438,5 millones de dólares a los 34 estados que le han demandando y han lanzando la pesquisa, fue anunciado este martes por el fiscal general de Texas, Ken Paxton, en un comunicado.
“Mi compromiso de proteger a los consumidores de las prácticas comerciales engañosas es inquebrantable, y cualquier empresa que engañe a los texanos, especialmente a nuestra juventud, será responsable de sus acciones”, escribió el fiscal en la nota.
La investigación encontró que Juul logró su puesto en el mercado de los cigarrillos electrónicos por medio de publicidad que intencionalmente buscaba atraer a los jóvenes. La compra de estos productos es ilegal para los menores de edad y su consumo es dañino en esas edades, aseguró la oficina del fiscal.
Los estados hallaron que Juul comercializaba de manera “incesante” los cigarrillos electrónicos a los jóvenes por medio de “fiestas de lanzamiento (…) publicaciones en redes sociales y muestras gratuitas”.
El acuerdo obliga a Juul a pagar la suma en un periodo de entre seis a diez años y a seguir mayores restricciones en el mercadeo y distribución de los cigarrillos electrónicos.
La investigación, que comenzó a principios del 2020, estuvo liderada por los fiscales generales de Connecticut, Florida, Nevada, Oregón y Texas.
Juul lleva tiempo en el punto de mira de las autoridades federales y el Gobierno ya ha tomado ciertas medidas para tratar de frenar el uso de los cigarrillos electrónicos entre niños y jóvenes, entre ellas prohibir los cartuchos para vapeo con sabores a frutas y menta.