Washington, 9 sep (EFE).- Después de que en agosto el gigante tecnológico Google sufriera una histórica derrota judicial frente al Departamento de Justicia estadounidense, este lunes arrancó en Virginia un segundo proceso por monopolio que podría cambiar las reglas del juego en el mercado de la publicidad digital.
Durante las próximas semanas (podría durar entre cuatro y seis), la jueza federal Leonie Brinkema de un juzgado de Alexandria, Virginia, escuchará los argumentos de ambas partes por una denuncia que alega que Google participó en prácticas anticompetitivas sistemáticas durante al menos 15 años y que desvió el gasto publicitario de los editores a su propio negocio de tecnología publicitaria.
En su declaración de apertura, la abogada del Departamento de Justicia Julia Tarver Wood acusó a Google de dominar el sector a través de adquisiciones y de manipular las reglas de las subastas de anuncios para su propio beneficio.
Por su parte, la abogada principal de Google, Karen Dunn, defendió que la compañía ha impulsado el sector a través de sus inversiones en investigación y desarrollo, que se enfrenta a un amplio campo de competidores y que las acusaciones son “erróneas” ya que “el éxito no es ilegal”.
Durante estas semanas se espera que testifiquen rivales del sector de la publicidad digital así como editores de noticias y otros expertos, en un proceso que estudiará si Google es responsable de violar la ley antimonopolio.
El objetivo principal de la demanda del Departamento de Justicia es demostrar que Google ejerce monopolio por su control de los componentes clave que influyen en los precios de los anuncios y si habría cobrado en exceso a los anunciantes y pagado de menos a los editores.
No es el único proceso relacionado al que se enfrenta la compañía estadounidense, pues el pasado viernes la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido acusó formalmente a Google de violar la ley antimonopolio en el mercado de la tecnología publicitaria.
El juicio arranca además un mes después de que el pasado 5 de agosto sufriera un revés en una corte de EE.UU., cuando un juez federal determinó que la empresa violó la ley antimonopolio en el mercado de los motores online de búsqueda, en el primer gran juicio de este tipo impulsado por la Administración de Joe Biden contra el gigante de internet.
“Google es un monopolista y ha actuado como tal para mantener su monopolio”, dictaminó el juez Amit P. Mehta en su opinión, en la que afirmó que la tecnológica ha violado la sección 2 de la Ley Sherman al mantener prácticas monopolísticas en servicios de búsqueda y publicidad general. Aún se desconoce la sanción que enfrentará Google tras esta decisión.