Ciudad de México, 22 feb (EFE).- La Asociación Mexicana de Energía Eólica (Amdee) advirtió este miércoles que muchas empresas que llegan a México por el fenómeno de relocalización de cadenas de valor o ‘nearshoring’ podrían abandonar el país de no incrementarse la capacidad energética con fuentes renovables.
“El recurso más importante es la energía. Si no hay forma de suministrar energía renovable a las empresas que lleguen al país, no creo que muchas se vayan a quedar”, alertó el presidente de la AMDEE, Gerardo Pérez Guerra.
El líder de los generadores eólicos en el país citó que la demanda máxima por electricidad en el país ha crecido un 9,2 %, lo que consideró “sin precedentes”.
Lo anterior, aseguró, supone retos técnicos en generación, transmisión y distribución, monopolios reservados para el Estado.
Pérez Guerra agregó que en este contexto se inscriben más de 35 proyectos detenidos por regulaciones mexicanas y la nueva política energética emprendida desde 2019 por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien busca priorizar a la compañía del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Detalló que son 28 proyectos de generación de energía eólica que están en desarrollo, equivalentes a más de 5.000 MW, a los que se suman cuatro proyectos completos que entran en operación en los próximos tres y cuatro meses, y tres más que aún no reciben fecha de inicio.
“Todas las grandes empresas estamos con las ganas y listos para continuar con el desarrollo, pero se ha perdido un tiempo valioso”, lamentó.
Desde 2019, el presidente López Obrador reformó la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) para despachar primero la energía generada por la CFE, por encima de las renovables de privados.
“Es muy difícil que los inversionistas decidan construir un proyecto para que luego se quede detenido y no se pueda operar”, comentó Pérez Guerra.
Además, explicó que el Gobierno y la CFE tienen un reto para aumentar la generación renovable porque la nueva legislación limita a 46 % la energía que los privados pueden generar.
Héctor Treviño, director ejecutivo de la Amdee, explicó que cada MW que no entra en operación equivale a una pérdida de 1 millón de dólares de inversión, mientras que se requieren montos entre 247.500 y 420.000 dólares promedio por cada kilómetro de línea de transmisión que se busque construir.
Mauricio Herrera, director adjunto de la Amdee, precisó que México tiene una deuda de 40 gigavatios para alcanzar las metas de transición energética a las que se ha comprometido.
El sector eólico en México ha invertido más de 13.000 millones de dólares en más de 71 parques, ubicados en 15 estados, que representan un 8,26 % de la capacidad instalada en el país, unos 7.413 MW.
Tan solo en 2023, el sector eólico en México generó el 5,98 de la energía eléctrica consumida en el territorio mexicano, en beneficio de cerca de 12,5 millones de hogares.