Ciudad de México, 5 feb (EFE).- México se prepara para tener la mayor transformación a su sistema de pensiones desde 1997 con una reforma constitucional del presidente, Andrés Manuel López Obrador, que ya cuenta con el apoyo de todos los partidos, aun sin conocer su contenido, y un costo estimado de hasta 2 % anual de su producto interno bruto (PIB).
El presidente López Obrador presentará este 5 de febrero, día de la Constitución mexicana, un paquete de cambios legales, entre ellas una al sistema de pensiones, que fue reformado por última vez hace poco más de 27 años.
El mandatario ha adelantado que buscará que un trabajador reciba, como pensión al retirarse, su último salario por completo; buscando contrarrestar la reforma del Gobierno de Ernesto Zedillo (1994-2000), que en 1997 creó las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore), sistema privado inspirado en el modelo de Chile.
Aun cuando se desconoce el contenido de la propuesta, esto ya ha generado una estimación de costo al erario de México y análisis contrastantes que han sostenido que su implementación es inviable, mientras que los distintos partidos, incluidos los opositores, han adelantado que apoyarán su iniciativa.
Inviable pensiones del 100 %, costarían hasta 2 % anual del PIB mexicano
El banco BBVA México consideró que sería inviable asegurar por completo que las pensiones de los trabajadores en México sean del 100 % de su último salario registrado “Implementar una tasa de reemplazo al 100% en toda la población fiscalmente no es viable y no ocurre en ningún otro lugar del mundo”, señaló en conferencia de prensa el economista en jefe de BBVA México, Carlos Serrano.
El analista consideró que las bajas tasas de retiro para los mexicanos se atendieron con cambios no constitucionales en 2020, que aumentaron la aportación de los empleadores al sistema de ahorro para el retiro de cada trabajador y advirtió que se deben de “vigilar las finanzas públicas”.
Pero el mandatario mexicano ha defendido que los recursos adicionales serían aportación del Gobierno mexicano y serían obtenidos por “más austeridad republicana”, y añadió que todo lo ahorrado será usado para este fin, con el objetivo de que “no le cueste tanto al pueblo”.
En un análisis, Citibanamex calculó que esta reforma podría costar hasta un 2 % anual del PIB del país, pues indicó que “los costos fiscales exclusivamente adicionales a los ya previsibles en la situación actual podrían representar 430.000 millones de pesos (casi 25.161 millones de dólares) en 2025 (1,3% del PIB), y que aumentarían rápidamente hacia 2 % del PIB en menos de 10 años”.
Este informe también consideró “excesivo” el objetivo, al citar que entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), a la que pertenece México, la tasa de reemplazo promedio es del 60 %.
Tema electoralmente atractivo podría costar mayor endeudamiento
Mary Carmen Fuertes, socia en Hogan Lovells, dijo que el tema se vuelve interesante en épocas electorales y resaltó que, “desde la última reforma en 1997 no hay recursos suficientes para que el Estado pueda garantizar el último salario de un trabajador”.
Es por ello que cuestionó de dónde vendrían los recursos públicos y opinó sería “un golpe fuerte para las instituciones que tendrían que hacer frente a esas obligaciones”.
Aparte, Alejandro Saldaña, economista en jefe del grupo financiero Ve por Más (Bx+), coincidió en que supondría “un gasto muy importante al Gobierno” mexicano, lo que, advirtió, provocaría un mayor endeudamiento al país para financiar este fin, “pues no se ve que haya fuentes adicionales que pudieran ayudarle” a paliar este aumento en el gasto público.
Partidos apoyarán reforma, López Obrador lo percibe como desesperación
En contraste, los partidos en el Congreso parecen estar de acuerdo en aprobar la reforma de López Obrador sin conocer su contenido, pues han manifestado que acompañarán la iniciativa.
Incluso, la candidata opositora Xóchitl Gálvez anunció que los partidos que la impulsan PAN, PRI y PRD votarán en favor de mejores pensiones para los trabajadores mexicanos.
Sin embargo, el presidente de México atribuyó esto a la “desesperación” electoral que vive la oposición, al verse favorecido el oficialismo en encuestas previas a la elección del próximo 2 de junio.
En este sentido, la candidata oficialista Claudia Sheinbaum, ha considerado que el paquete de reformas que presentará hoy el mandatario mexicano, entre las que se incluye la reforma a las pensiones, son un conjunto de cambios “que fortalecen los derechos, las libertades y la democracia en el país que es esencia de nuestro proyecto”.