Washington (EE.UU.), 16 ene (EFE).- El Senado de EE.UU. aprobó este martes un proyecto de ley con el objetivo de alcanzar la conocida como resolución de continuidad, medida provisional para evitar que el Gobierno caiga en ‘shutdown’ -cierre administrativo por falta de fondos- antes de la fecha límite prevista para finales de semana.
Se trata del primer escollo que debía superar la Cámara Alta de EE.UU., cuya votación se saldó con 68 votos a favor y 13 en contra, para intentar ampliar el plazo de financiación del gobierno hasta el 1 y el 8 de marzo, mientras el Congreso trabaja para un acuerdo a largo plazo.
“Si ambas partes (demócratas y republicanos) continúan trabajando de buena fe, tengo la esperanza de que podamos concluir el trabajo a más tardar el jueves (…) La clave para terminar nuestro trabajo esta semana será la cooperación bipartidista en ambas cámaras”, dijo Chuck Schumer, líder de la mayoría demócrata en el Senado, en un comunicado.
El propio Schumer ya pactó cuáles serían los niveles generales de gasto en los diferentes proyectos de asignación anual con el republicano Mike Johnson, presidente de la Cámara Baja de EE.UU.
“Dado que los plazos de vencimiento están a la vuelta de la esquina, es necesaria una resolución de continuidad para completar lo que los republicanos de la Cámara de Representantes se están esforzando por conseguir: el fin del gobierno ómnibus, victorias políticas significativas y una mejor administración del dinero de los contribuyentes”, afirmó Johnson en un texto oficial.
De aprobarse esta propuesta de prórroga presupuestaria sería el tercer acuerdo de gasto a corto plazo al que el Congreso da luz verde desde septiembre.
El primero le costó la destitución al entonces presidente de la Cámara Baja, Kevin McCarthy, impulsada por un grupo de sus propios legisladores.
Algunos republicanos aún siguen frustrados de que su mayoría en la Cámara de Representantes no esté sirviendo para promover los recortes presupuestarios que anhelan.
Los demócratas han preferido mantener el Gobierno en funcionamiento antes que explotar la división interna republicana, pero han lamentado que la prórroga aleje aún más la aprobación de nueva ayuda militar a Ucrania y a Israel.
“La única táctica que la derecha dura tenía en su libro de jugadas es intimidar a todos los demás hasta la sumisión, al igual que hace Donald Trump (…) No pueden ganarse a la gente con argumentos. Así que la intimidación parece ser su camino a seguir”, recalcó Schummer este martes.
En caso de “shutdown”, cerca de dos millones de personas dejarían de cobrar su sueldo -la mayoría recuperaría el dinero de forma retroactiva- y aunque muchos de ellos dejarían de trabajar, otros muchos, como los militares o trabajadores de aeropuertos, estarían obligados a seguir cumpliendo.
La falta de fondos provocaría todo tipo de consecuencias y dolores de cabeza para la Administración, desde el cierre de museos y parques nacionales hasta la suspensión de inspecciones sanitarias de alimentos o la interrupción de programas de investigación científica.
El último “shutdown” ocurrió durante la Presidencia del republicano Donald Trump (2017-2021) y fue, con 35 días (del 22 de diciembre de 2018 al 29 de enero de 2019), el más largo de la historia.