Nueva York, 3 ago (EFE).- La “rica literatura” infantil que se produce en toda Latinoamérica es casi desconocida en Estados Unidos, y por ello una editorial neoyorquina quiere darla a conocer traducida del español y el portugués al inglés, pero respetando las ilustraciones originales.
Su objetivo: mostrar la diversidad al tiempo que los puntos en común entre las personas.
La editorial Tapioca Stories ya ha publicado cinco libros desde el 2002, que han sido distribuidos a librerías través del país, comentó a Efe su fundadora, Yael Bernstein, que nació en Chile, creció en Brasil y estudió en Israel, donde conoció a su esposo argentino.
“Siempre he estado fascinada por los libros ilustrados”, afirma a Efe Bernstein, quien con un doctorado en matemáticas aplicadas trabajaba como científica en un laboratorio de genética, pero acabó dejando ese empleo para seguir su pasión: la literatura.
Bernstein apunta que todo comenzó cuando quiso comprar libros en español para leer a sus hijos o hacer un regalo pero se encontró con que “hay muy poco” de Latinoamérica a pesar de que “es una literatura muy rica” desde hace mucho tiempo y actualmente hay “abundancia” de libros infantiles de calidad.
Ella y su esposo argentino compraban entonces libros en inglés que traducían simultáneamente al portugués y al español cuando los leían a sus hijos.
“Me di cuenta de que todos esos libros (en español) que creía estaban acá (en EEUU) porque son clásicos, que todos conocían en Latinoamérica, no lo estaban y comencé a investigar por qué, mientras seguía trabajando en el laboratorio de genética, pero pensando en eso”, comentó.
Su interés llevó a Bernstein a una feria de libros organizada por la American Booksellers Association en Nueva York, donde asistió a charlas en las que aprendió cómo entrar a un mundo que le fascinaba pero hasta entonces desconocía y a hacer contacto con editoriales en Latinoamérica.
Poco tiempo después, en 2019, dejó su trabajo y fundó “Tapioca”, nombre que surge por la nostalgia de Bernstein de su infancia en un país tropical y los alimentos que en Brasil se preparan con tapioca, en otros lugares llamada yuca o mandioca.
Aunque no tenía experiencia en publicaciones, Bernstein contó con el asesoramiento de su amigo Uriel Kon, editor de Nine Lives Press en Tel Aviv.
“Fundé la compañía para traer esos libros con sabor latinoamericano. Son historias universales con las que cualquiera se puede identificar pero tienen un tono distinto, esos pequeños matices de la manera en cómo nos comunicamos, el humor es distinto”, comenta con entusiasmo Bernstein, que cuenta con Baker & Taylor para distribuir los libros en EE.UU y Canadá.
Tapioca ya ha traducido y publicado libros para niños de autores premiados: “El ascensor” (The Elevator) de la argentina Yael Frankel y “El invisible” (The Invisible) de los brasileños Alcides Villaça y Andrés Sandoval.
También “AaaHHH! del brasileño Guilherme Karsten, “La playa” (The Beach) de la arquitecto e ilustradora chilena Sol Undurraga, y “Nadadores” (Swimmers) de la también chilena María José Ferrada.
De Ferrada, autora que en pasado junio recibió el Premio Cervantes Chico Iberoamericano, publicará además este año “Mi vecindario” (My Neighborhood).
Los libros infantiles, que son cortos y cuentan con detalles de la cultura del autor, son elegidos por Bernstein y dice que los lee primero a sus propios hijos para saber su reacción.
En estos libros traducidos se destacan las ilustraciones con que fueron publicados originalmente en español.
“Creemos que exponer a los niños a nuevas perspectivas desde el principio puede alentarlos a convertirse en adultos más empáticos, perceptivos y reflexivos”, indica Tapioca Stories en su página, en la que señala además que los libros que eligen “intensifican las emociones, fomentan la curiosidad y hacen volar la imaginación de los niños”.